En vista de los resultados, no deja de resultar curioso que Warner no confiara en el éxito de una película como Joker. Entre bailes de nombres al cargo de la producción e intentos de sabotaje por parte de un dolido Jared Leto, la major invirtió apenas 62 millones de dólares en la obra que dirigiría Todd Phillips, una ridiculez dentro del blockbuster actual que ha acabado convirtiéndola en la película basada en un cómic más rentable jamás realizada. Pero ese sólo es uno de los varios récords con los que ya cuenta.
La película que protagoniza Joaquin Phoenix también alcanzó la recaudación suficiente para ser la película calificada R más taquillera de la historia, recibiendo las felicitaciones de Ryan Reynolds, pero desde entonces no ha dejado de ganar dinero, y ya ha conseguido sobrepasar la barrera de los 1.000 millones de dólares en taquilla. Siendo al mismo tiempo el primer film R que lo hace, y también conformándose como la cuarta producción de DC que lo logra tras Aquaman y las dos últimas entregas de El caballero oscuro.
El logro de Phillips y compañía es aún mayor si reparamos que el cómputo de taquilla de 2019, hasta ahora, había estado en manos casi por completo de las producciones de Disney. La cual, obviamente, mantiene incontestable su reinado habiendo estrenado hasta cinco películas que superaron esta cifra, pero no deja de ser un tanto para DC, y además hay que tener en cuenta que Joker aún no se ha estrenado en China. ¿Le quedarán récords por batir?
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