¿Cuánto cambió 'Rogue One' a última hora?

"Conozco los rumores, pero en todas las películas de gran presupuesto en las que he trabajado ha habido reshoots. Debemos recordar que esta clase de polémicas son publicidad gratis para el estudio", nos dijo Mads Mikkelsen cuando hablamos con él sobre Rogue One: Una historia de Star Wars [entrevista completa en CINEMANÍA 255] y le preguntamos por la grabación de nuevas escenas que tanto revuelo causó entre los fans.

Tal y como indica el actor danés, la práctica de los reshoots se ha hecho habitual en los grandes blockbusters, cuyos calendarios de rodaje siempre dejan un puñado de días extra de trabajo en set y localizaciones para semanas después de la filmación principal. Así se aseguran la posibilidad de añadir escenas o planos necesarios una vez que se arma el montaje de las escenas clave. A veces puedes necesitar una toma de escucha que te falta, clarificar el espacio en alguna escena de acción o remates así. En otras ocasiones, se añaden secuencias completas que no estaban contempladas.

¿Fue este el caso de Rogue One, donde según se dijo Gareth Edwards dejó paso en la silla de dirección a Tony Gilroy y Simon Crane? ¿Cuánto rodó Gilroy? ¿Ordenó Disney/Lucasfilm que la película de Edwards rebajara su tono bélico original? Entre rumores, invenciones (como la supuesta intervención de Christopher McQuarrie, que el mismo cineasta desmintió) y especulaciones, puede que pasen varios años hasta que sepamos la auténtica historia detrás de las cámaras de Rogue One al completo. Sobre todo porque el resultado no ha sido precisamente un desastre a lo Cuatro Fantásticos o Escuadrón Suicida; el montaje final guarda mucha más coherencia que otros blockbusters del último verano y la película ha tenido un apoteósico estreno en taquilla.

No obstante, sí hay una manera de hacerse una idea aproximada de los cambios introducidos en Rogue One durante la grabación de nuevas escenas. Ya que Lucasfilm nos enseñó hasta 10 minutos de metraje durante la extenuante promocional, podemos utilizarlos como guía para comparar la película final que ha llegado a cines con la que pudo ser en cierto momento. Siguiendo los pasos de Peter Sciretta en SlashFilm, esto es lo que los tráilers de Rogue One nos dicen de la película que no hemos visto.

A partir de aquí, SPOILERS DE 'ROGUE ONE: UNA HISTORIA DE STAR WARS', por supuesto.

– "Falsificación de documentos imperiales, posesión de propiedad robada, agresión con agravantes y resistencia a la detención".

– "Sola desde los 15 años, irresponsable, agresiva e indisciplinada".

– "Esto es una rebelión, ¿no? Yo me rebelo".

De esta forma tan contundente se nos presentó a Jyn Erso (Felicity Jones) en el primer tráiler oficial. Aunque su espíritu rebelde e inconformista se ha mantenido en la película final, algunas voces indican que uno de los cambios exigidos por el estudio fue suavizar en cierta medida el carácter difícil de la heroína del filme, haciendo de igual modo que la historia terminara siendo más coral. De hecho, el pasado problemático de Jyn como delincuente juvenil ha sido prácticamente suprimido, mientras que su desencuentro con los líderes oficiales de la Alianza Rebelde en Yavin IV se demuestra con diálogos diferentes.

No es el único elemento distintivo del personaje de Felicity Jones que se ha quedado fuera de la película final. El plano más icónico visto en los tráilers, cuando Jyn Erso lleva el traje de oficial del Imperio y se gira a cámara mientras se encienden las luces, no lo verás en el cine.

Otra porción de guión que los fans recibieron con entusiasmo y no llegó al corte final del filme: la severa admonición que echa Saw Gerrera (Forest Whitaker) a Erso. "¿Qué vas a hacer cuando te atrapen? ¿Qué harás si te derrumbas? ¿Si continúas luchando? ¿En qué te convertirás?". ¿Hablaba el guerrero rebelde de su propia experiencia de accidentada lucha contra las fuerzas imperiales? Está claro que la convicción le cambió de manera fulminante física y psicológicamente. En una de las featurettes detrás de las cámaras también se puede ver a Felicity Jones junto a Whitaker rodando una escena de acción fuera de la guarida de Jedha de la que no queda ni rastro en la película estrenada en cines.

Este quizás sea el cambio más significativo entre el primer corte de Rogue One que hizo Gareth Edwards y el que ha terminado estrenándose: una remodelación del último acto del filme. Muchos de los fragmentos de la batalla en la playa de Scarif que aparecen en diversos tráilers no han llegado al corte final, posiblemente siendo reemplazados por otros nuevos, filmados durante los días de rodaje adicionales. El cambio es significativo, porque en esas escenas se puede ver que Jyn Erso está corriendo con los planos robados en la mano.

Por lo tanto, el plan de transmitir la información desde la antena no debió de salir bien o estar planteado de una forma completamente distinta. Esa posibilidad la refuerza el hecho de que el bueno de K-2SO (Alan Tudyk) también está presente en la huida, así que no tenía el mismo sacrificio heroico impidiendo que los stormtroopers entraran al archivo donde se encontraban Erso y Andor (Diego Luna). 

¿Más pruebas de su huída? Mira cómo corren con los planos en la mano por las instalaciones del tren que lleva de la playa a la base imperial donde se encuentra el archivo. Esta secuencia, de la que apenas queda un breve fragmento para situar la llegada del trío a las instalaciones, se rodó en la estación de metro de Canary Wharf en Londres y recibió mucha atención durante la Star Wars Celebration de primavera. ¿Por qué dedicarle tanto interés si luego apenas aparece en el filme? Seguramente ese no fuera el plan inicial.

En la Rogue One definitiva nos hemos quedado sin comprobar la limpieza impoluta del suelo de la Estrella de la Muerte, donde se reflejaba la silueta del Señor Oscuro de los Sith en el segundo tráiler oficial de la película. Un plano bien chulo que, la verdad, también es una pena haber perdido. ¿Hay alguna imagen más de las vistas durante la promoción de Rogue One que echaste de menos en el cine? Cuéntanoslo en los comentarios.