¿Será 'Doom Patrol' la mejor serie de DC?

Aquellos fans de DC Comics que no comulgan con las películas del sello en pantalla grande tienen buenas razones para ponerle un monumento a Greg Berlanti. Con Arrow, Flash, Supergirl y Leyendas del mañana, entre otros trabajos para The CW, el productor y director ha ofrecido un punto de vista sobre la decana del cómic de superhéroes radicalmente distinto al de Batman v Superman y Liga de la Justicia, pese a la falta de medios y a su ocasional tono kitsch. Pero el caso de Doom Patrol, la nueva serie sobre aventureros disfrazados que producirá Berlanti, puede ser especial: este show, que acaba de fichar a Timothy Dalton como mentor de sus protagonistas, se propone adaptar una de las cabeceras más locas e inclasificables jamás publicadas por la editorial.

La Patrulla Condenada, como se la conoció en España, nació en 1963, el mismo año que los X-Men: de ahí que los fans de DC y los de Marvel se enzarcen ocasionalmente en debates del tipo "¿quién plagió a quién?". Pero esto es una mera anécdota, puesto que la colección fue evolucionando con los años hasta convertirse en una gozosa gamberrada. Guionistas tan heterodoxos como Grant Morrison, en los 90, y Gerard Way (responsable de su última versión, lanzada en 2017 y aún en activo) han aprovechado su cariz imprevisible para ofrecer aventuras llenas de referencias artísticas y literarias, con un sentido del humor tan fino como destroyer y un tono decididamente surrealista. Algo que, llevado a la TV, puede estar más cerca de un desparrame como Legión que del noir de Arrow o la ciencia-ficción a toda velocidad de Flash.

Lo primero que destaca de la Doom Patrol son sus héroes: héroes segundones, por lo demás. Incluso muchos fans de los cómics responderían con un asombrado "¿quién?" a la mención del metálico Robotman (Brendan Fraser en la serie) o el Hombre Negativo (Dwain Murphy). Esto plantea una ventaja muy significativa, porque es mucho más fácil tomarse libertades con un héroe no demasiado conocido que hacer lo propio con un Superman, un Batman o una Wonder Woman. Pero hay algo más, y es el hecho de que los poderes de estos héroes no son ni mucho menos los esperables en un superhéroe: sin ir más lejos, la serie también contará con Crazy Jane (Diane Guerrero, Orange is the New Black), una encantadora jovencita con 64 superpoderes distintos... y una personalidad diferente para cada uno de ellos. Incluso un personaje tan majara como Flex Mentallo (el culturista capaz de alterar la realidad cada vez que saca bíceps) ha tenido un lugar en ella.

Y, claro, si los héroes son muy raros, los villanos tienen que ser más raros aún. Durante los primeros años del equipo, sus archienemigos fueron la Hermandad del Mal, una tétrica banda liderada por Cerebro (el cual, como su propio nombre indica, es... un cerebro) y que contaba entre sus componentes con un gorila (Monsieur Mallah) y con el entrañable Hombre Animal, Vegetal y Mineral, entre otros. Pero el no va más llegó en 1992, cuando Grant Morrison tomó las riendas de la colección y transmutó a la Hermandad del Mal en... ¡la Hermandad del Dadá! Dado que Alan Tudyk interpretará a su líder, el Señor Nadie, tenemos razones para suponer que habrá un lugar en la serie para estos malhechores tan absurdos y literarios. ¿Se pasarán también por sus capítulos Red Jack, el Descreador, el Club de los Barbudos o el Maestro Limpiador? Esperemos que sí...

Finalmente, una serie de la Doom Patrol como debe ser debería contar con sus secundarios. Y, dado que ya solo con las personalidades de Crazy Jane hay como para completar un reparto entero, no pidamos milagros: lo único que exigimos es la presencia de Danny la Calle, una vía pública creada en homenaje al transformista inglés Danny LaRue (¿lo pillas?), la cual se expresa en polari (la vieja jerga del mundo homosexual de Londres) y luce más pluma que un edredón antiguo. ¿Hemos dicho que estos cómics fueron pioneros a la hora de abordar temas LGBT? Pues sí fíjate. También es obligatorio mencionar a Willoughby Kipling, investigador paranormal con gabardina sin nada, pero nada que ver con cierto John Constantine, personaje que no podía aparecer en sus páginas por temas de continuidad editorial. ¿Una buena ocasión para que Matt Ryan se marque un cameo? Esperemos que sí.

Así pues, si Berlanti le echa valor y ganas, Doom Patrol puede ser una buena puerta de entrada televisiva para el lado más experimental de DC, dado que la serie de Sandman parece haberse perdido para siempre en la tierra de los sueños y que el pobre Constantine no logra echar raíces en la pequeña pantalla. Esperemos que sea así, porque esta faceta de los superhéroes ha sido mucho menos aprovechada de lo que debiera por el audiovisual... y los pobres Noah Hawley y Dan Stevens se merecen un rival a su altura para competir por el público más ávido de emociones fuertes.