BBC y Netflix retiran 'Little Britain' de su catálogo por sketches con 'blackface'

Desiree DeVere (izquierda) y Bubbles DeVere (derecha) son rivales de la alta sociedad de Leeds, dos de los esperpénticos personajes que interpretaban, respectivamente, David Walliams y Matt Lucas en el programa de humor Little Britain, emitido por la BBC entre 2003 y 2007 durante cuatro temporadas, llenas de sketches protagonizados por caracterizaciones extremas y visiones grotescas de distintos arquetipos de la sociedad británica en toda su diversidad.

Esta semana, la BBC, junto a plataformas de streaming como Netflix y BritBox, han retirado Little Britain de sus catálogos por la presencia de sketches, como los de las DeVere, donde los humoristas hacían blackface; es decir, se maquillaban la cara y el cuerpo para interpretar a personajes negros. Una práctica que ha sido tildada de racista y se considera inaceptablemente irrespetuosa en la actualidad.

La decisión de retirar Little Britain, que ha sido tomada tras el repunte en las manifestaciones antirracistas del movimiento Black Lives Matter en EE UU y el resto del mundo, también ha afectado a Come Fly with Me, la continuación no oficial de Little Britain emitida entre 2010 y 2011. Ambientada en un aeropuerto internacional, entre los papeles que interpretaban Walliams y Lucas había personajes japoneses, paquistaníes, jamaicanos y de Oriente Medio.

"Hay un montón de programación histórica que vamos revisando periódicamente", ha declarado un representante de la cadena en el Daily Mail. "Los tiempos han cambiado desde la primera emisión de Little Britain y ya no está disponible en el iPlayer de la BBC". Una explicación exacta a la ofrecida por BritBox, según recoge Deadline.

En 2017, Matt Lucas expresó en una entrevista con Big Issue que lamentaba haber interpretado papeles con blackface en el pasado. "Ahora pienso que es perezoso por parte de humoristas blancos buscar la risa simplemente interpretando personajes negros", afirmaba.

"Ahora mismo no haría algo así. La gente se molestaría. Hacíamos un tipo de comedia cruel que ya no practico", explicaba el humorista. "La sociedad ha evolucionado mucho desde entonces y mi propia visión también. No había mala intención, de lo único que nos podrías acusar es de avaricia. Simplemente queríamos demostrar toda la variedad de gente que éramos capaces de interpretar".