Dicen que los grandes humoristas suelen ser, de suyo, personas bastante puñeteras: eso de fijarte en los aspectos más innobles de la vida para hacer reír a la gente, es lo que tiene. Y, si aceptamos esta teoría, pensar en qué mecanismos se activaron anoche en la mente de Steve Carell da hasta miedo. Cerca de las 10 de la noche, hora española, el comediante y ferretero revolucionó a los fans de The Office anunciando en su twitter que el remake estadounidense de la serie iba a volver a la parrilla de NBC. Es decir, que volveríamos a verle interpretando a Michael Scott, y que las oficinas de Dundler Mifflin volverían a abrir sus puertas. Imagínese el regocijo.
Un regocijo que duró... seis minutos. Porque ese fue el tiempo que tardó Carell en postear otro tuit, en el que reconocía su 'error': "Perdón, esperad. Quería decir Will y Grace. Errata".
Nosotros nos ponemos en el lugar de Steve: es perfectamente comprensible que te equivocaras al escribir el nombre de la influyente sitcom que regresará este año con 10 nuevos episodios, y en su lugar pusieses el de la serie que te lanzó a la fama mundial. Y que, casualmente, también es de NBC. A nosotros nos pasa todo el rato. Bromas aparte, si Carell sigue así, no tardará en alcanzar el nivel de Bill Murray para trollear a su público.
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