Desafiando a todos los que pensábamos que convertir la pequeña maravilla de Fargo (1996) en una serie de televisión era una muestra más del declive creativo de la industria, incapaz de seguir hacia delante sin soltar éxitos del pasado, el bueno de Noah Hawley sorprendió con su reformulación de la película de los Coen para convertirla en una de las series más celebradas y aclamadas del momento.
Las dos temporadas de Fargo, con sus personajes y situaciones de absurdo existencial tan puramente coeniano, demostraron que ese rico universo de criminalidad rural y nieve todavía tenía muchas vetas por explorar. Pero si algo tuvo en cuenta siempre Hawley fue la respetuosa cita a la película original, unas veces de forma más explícita que otra.
Arnau Orengo se ha encargado de rastrear los pequeños guiños y paralelismos que se esconden en las dos temporadas de Fargo, la serie, hacia Fargo, la película. El resultado es tan revelador como fascinante, añadiendo muchas más capas de significado a la construcción de la serie. Estaremos muy atentos en la tercera temporada. ¿Identificaste tú también todos estos paralelismos a la primera?
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