DISECCIÓN SIN SPOILERS de las tres nuevas entregas de Black Mirror. Andrew Scott, Damson Idris y Topher Grace protagonizan Smithereens (Añicos).
La tecnología: Uber y otras aplicaciones móviles.
La estrella: Sin duda, este es el gran año de Andrew Scott. Ha provocado más de un suspiro en la magnífica segunda temporada de Fleabag como objeto de deseo de Phoebe Waller-Bridge, que encuentra irresistible el alzacuellos que luce Scott como cura de su parroquia. Bien secundado por un breve cameo de Topher Grace.
La trama: Scott interpreta al dueño de una VTC obsesionado con una empresa tecnológica. Aunque ya sabemos que este negocio no pueden tener un punto fijo a él le dan igual. Cada día hace guardia a la puerta del edificio acristalado esperando a tener como clientes a sus trabajadores, pues tiene asuntos pendientes que solucionar con la multinacional. Un relato de vengaza… o algo así.
El fondo: Vuelve aquí Brooker a uno de sus temas más queridos: ¿hasta qué punto somos dependientes de la tecnología? ¿Qué influencia tiene la misma no ya en nuestra vida, sino en nuestra muerte? A pesar de ello, probablemente sea el episodio más flojito (también el menos retorcido) de la nueva terna.
La curiosidad: ¿Sillicon Valley en Almería? En la cabeza de Charlie Brooker sí es posible. Buena parte del capítulo se ha filmado en el reconocible paraje del sur de España.
Comentarios
Hemos bloqueado los comentarios de este contenido. Sólo se mostrarán los mensajes moderados hasta ahora, pero no se podrán redactar nuevos comentarios.
Consulta los casos en los que 20minutos.es restringirá la posibilidad de dejar comentarios