Terminator: Destino Oscuro

Terminator: Destino Oscuro
Terminator: Destino Oscuro
Terminator: Destino Oscuro

A pesar de que la nostalgia evoca recuerdo, es asombroso lo mucho que requiere de amnesia. Porque si bien revivir (¡por sexta vez!) un título como Terminator implica querer volver a conectar con ciertos personajes, indudablemente también conlleva haberse olvidado de los mismos. Todos tenemos presentes el “I’ll be back”, el “Sayonara Baby”, las escenas de acción, los efectos especiales, Sarah Connor, su hijo, esas cosas. Pero nos cuesta más acordarnos de qué iba la tercera, si la de Khaleesi es tan mala como recordamos o de aquel enfado legendario de Christian Bale rodando Terminator: salvation (vayan a YouTube para disfrutarlo).

Así que aquí nos encontramos, una vez más, entregados a la causa, haciendo concesiones a una saga que no termina (¡já!) de palmarla, aunque quizá debería. Acudiendo al cine por una mezcla de curiosidad, olvido y bombardeo de publicidad habitual. La historia en esta sexta entrega no presenta ninguna novedad. Robots del futuro son enviados al presente para proteger o acabar con una humana concreta que tiene en sus manos la llave para evitar el apocalipsis. Nos suena. Además, como buen blockbuster con tintes de reboot mezclado con enésima entrega de saga, parece querer aportar un equilibrio fallido entre homenaje y actualización a los tiempos que corren. Planazo.

Pero, sorpresa, Terminator: destino oscuro funciona. Honestamente. En su homenaje, funciona por leve. De acuerdo, las frases emblemáticas están ahí, Schwarzenegger sigue a lo suyo y la falta de riesgo hace que sea imposible superar cualquier herencia. Pero todos estos elementos están reducidos al mínimo para dar protagonismo a una película de acción pura, con escenas rodadas con ritmo y diseñadas de manera ambiciosa, en lo que parece una auténtica colaboración entre todo el equipo, pero sobre todo apunta ser la primera secuela con un director (Tim Miller) que proyecta compromiso real y en la que quizá James Cameron haya hecho algo más que firmar. Cuenta, además, con unos personajes de motivos claros. Un cóctel que prioriza el entretenimiento por encima de intentar revivir un producto. En su actualización, funciona gracias a dos grandes actrices. Mackenzie Davis (Black Mirror, Blade Runner 2049), quien interpreta con soltura a Grace: una soldado mejorada enviada al pasado para salvar a la humanidad. Pero, sobre todo, Linda Hamilton. La eterna Sarah Connor tiene un revival de su papel más emblemático que transmite autenticidad y carisma, resulta empoderador y coherente.

Así que al final tenemos la constatación de que no hay nada que impida continuar a una saga como Terminator (o como Toy Story, o como Jurassic Park). Ni grandes fracasos, ni guiones endebles, ni fórmulas evidentes. Por mucho que el panorama no pinte bien, una sexta oportunidad lo cura todo. Y es que, como decía Ferris Bueller en aquél otro fenómeno de los ochenta que por suerte no tiene (todavía) remake: “no te estás muriendo, es solo que no se te ocurre nada mejor que hacer”.

Valoración:

FICHA TÉCNICA

Terminator: Destino Oscuro
  • Director:
  • Género:

    Acción, Ciencia-ficción

  • País:

    Estados Unidos

  • Sinopsis:

    Un Terminator líquido del futuro viene dispuesto a terminar con la vida de una joven. Sarah Connor y un híbrido de cyborg y humano tendrán que protegerla, pero no lo tendrán nada fácil.

  • REPARTO: Mackenzie Davis

  • GUIÓN: David S. Goyer, Billy Ray, Josh Friedman, Justin Rhodes

  • VEREDICTO: si llegas a esta saga con un mínimo de interés, saldrás recompensado. Si no, no te culpamos.

  • DURACIÓN: 128 min.

  • DISTRIBUIDORA: 20th Century Fox

  • ESTRENO: 31/10/2019

Mostrar comentarios

Códigos Descuento