Viajes y rodajes

Ruta Spaghetti Western

La película: El bueno, el feo y el malo (Sergio Leone, 1966)

Itinerario: ¿Quieres sentirte como un Clint Eastwood con poncho y cigarro? Pues no esperes más y embárcate en esta travesía que, comenzando en el Cabo de Gata, te llevará por parajes almerienses de nombres tan sugerentes como el Cortijo de la Hoya Altica, Cortijo Higo Seco y Rambla Alfaro, pasando por el legendario Desierto de Tabernas. Cual si le persiguiera un Lee Van Cleef, nuestra ruta da luego un giro al Norte para, tras una escala madrileña (Colmenar Viejo, Manzanares el Real y La Pedriza), recorrer lugares de alto interés cultural como el Monasterio de San Pedro de Arlanza (Covarrubias, Burgos) y Salas de los Infantes, el pueblo a orillas del río Arlanza donde (dice la leyenda) está enterrado el tesoro perdido de la Confederación. Un viaje, en definitiva, pensado para hacer las delicias de hombres sin nombre y mujeres con rifle al hombro.

Ruta cimmeria

La película: Conan el bárbaro (John Millius, 1982)

Itinerario: Al ritmo machacón de la música de Basil Poledouris, nos ponemos en camino hacia paisajes sureños e inexplorados. En concreto, hacia la costa de Almerimar (Almería, claro), el lugar que vio a un casi debutante Schwarzenegger partir rumbo a la aventura que le convertiría en rey (“por sus propios medios”). En concreto, el futuro governator se dirigía a la conquense Ciudad Encantada, formación geológica en la que el viajero debe llevar mucho ojo con las brujas caníbales y los lobos rabiosos. Un poco de teletransporte (cortesía de los hechiceros de la Era Hiboria) nos lleva a la mítica ciudad de Zamora, que según los textos deRobert E. Howard no está en Castilla y León, sino tirando por Las Salinillas (Almería). Los viajeros con inquietudes espirituales pueden aprovechar y tomar un desvío hacia el Peñón de Bernal, en el término municipal de El Ejido, lugar de reunión habitual de los discípulos deThulsa Doom (James Earl Jones).

Ruta cyberpunk

La película: Blade Runner (Ridley Scott,  1982)

Itinerario: Nuestro lector Rick Deckard, de profesión cazador de replicantes, nos ha hecho llegar este práctico itinerario de viaje, ideal para conocer una cara de Los Ángeles muy diferente a la que muestran las revistas del corazón. Porque Rick (quien, por cierto, se parece mucho a Harrison Ford) suele recorrer el lado más oscuro de la ciudad californiana: su ruta, ideal para un día lluvioso, transcurre por joyas de la arquitectura civil de EE UU como el Edificio Bradbury, un precioso complejo residencial que ya sirviera de escenario a Perdición, de Billy Wilder. Tras nuestro tour, que incluye un duelo a muerte con un doble de Rutger Hauer (paloma incluida), te llevaremos por lugares como la Ennis-Brown House (diseñada por el genial Frank Lloyd-Wright), y el famoso Million Dollar Theatre, tras cruzar el larguísimo túnel de 2nd Street. Si buscas una excursión cuyos recuerdos no se pierdan como lágrimas en la lluvia, créenos: es esta.

Ruta obsesiva

La película: El resplandor (Stanley Kubrick, 1980)

Itinerario: Como no por mucho madrugar amanece más temprano, nos encaminamos con mucha calma hacia este selecto tour propuesto por Jack Torrance, vigilante del Hotel Overlook. Pese a permitirle gozar de las vistas del Lago St. Mary (Montana) y de tener toda la filmografía de Jack Nicholson en dvd, Jack se aburre bastante, así que se ha entretenido mandándonos la lista de los establecimientos hoteleros de EE UU que inspiraron su lugar de trabajo. Según nos informa, mientras que  la fachada del Overlook se corresponde con elTimberline Lodge (Oregón), el resto de dependencias siguen el diseño del Awahnee Hotel (Parque Nacional de Yosemite), selecto resort de montaña edificado en 1927. Reconstruido con perfeccionismo kubrickiano, el conjunto nos ofrece divertidos extras al entrar en los ascensores (aconsejamos cogerlos con el impermeable puesto, por si la sangre) y animadas fiestas en el salón de baile, accesibles sólo para huéspedes VIP con invitación del barman.

Ruta postapocalíptica

La película: Terminator (James Cameron, 1984)

Itinerario: Un lector que firma con el seudónimo de Skynet nos ha pedido un favor muy especial: resulta que su amigo T-800, un chicarrón de notorio parecido con Arnold Schwarzenegger, necesita encontrar urgentemente a una tal Sarah Connor, residente en Los Ángeles. Pese a su aspecto, el hombre es bastante tímido y la ruta le va a llevar por lugares de la ciudad que no conviene recorrer de noche, como el Griffith’s Park y el club Technoir (situado en la esquina de Broadway con la Séptima Avenida), así que nos hemos ofrecido a acompañarle. Tras dejar las maletas en el Tiki Motel de Huntington Park, la ruta nos permitirá aprovisionarnos de armamento pesado en Alamo Boulevard, para después descargarlo en la comisaría de Cudahy y la fábrica siderúrgica Kern’s of California. Nuestro acompañante no para de repetir “Volveré”, así que el viaje debe merecer la pena…

Ruta moqueante

La película: Los cazafantasmas (Ivan Reitman, 1984)

Itinerario: ¿Te apasiona el mundo paranormal? ¿Siempre has querido hacer un viaje a Nueva York y California? ¡Perfecto! Esta ruta está hecha para ti. Comenzaremos nuestro periplo cultural en la neoyorquina Universidad de Columbia, ilustre centro donde el doctor Peter Venkman imparte clases sobre la vida y obra de Bill Murray. Nuestro anfitrión, junto a sus socios Egon y Ray, tiene que cuidar de su negocio privado (oficinas sitas en el North Moore Street, 14), así que nos aconseja visitar a su amiga Dana Barrett, que reside en el famoso edificio 55 Central Park West. Aunque este bello lugar (levantado en 1929) es ideal para invocar a deidades babilónicas, el doctor Venkman nos anima a seguir nuestro viaje con una visita a la Central Library de Los Ángeles, para documentarnos, rematándolo con una noche en el exclusivo Biltmore Hotel. Su único consejo para la travesía: “Si alguien te pregunta si eres un dios, respóndele que sí”.

Ruta ‘Yippie-Kay-Yay’

La película: La jungla de cristal (John Mc Tiernan, 1988)

Itinerario: Como amantes de la arquitectura, cuando nuestro amigo John McLane nos ofreció viajar a Los Ángeles para visitar el famoso edificio Nakatomi Plaza (Fox Plaza, según otras fuentes) no dudamos en aceptar. La verdad es que John se acaba de divorciar, y a veces tiene un pronto que ni Bruce Willis con resaca, pero está siendo de lo más solícito al enseñarnos los rincones más recónditos del lugar. La necesidad de esquivar a los numerosos seguratas del lugar es perentoria (vale escurrirse por los túneles de ventilación, de los que está lleno el inmueble), y aconsejamos no hacer pintadas aunque tengáis una ametralladora (“¡Ho, ho, ho!”).

Ruta alienígena

La película: E. T., el extraterrestre (Steven Spielberg, 1982)

Itinerario: Pobre Spielberg: cuando sus padres se divorciaron, no sólo le dieron un tema recurrente para su futura carrera cinematográfica, sino también un punto de partida para su blockbuster más sentimental, lleno de recuerdos de infancia solitaria. Californiano de pro, Steven nos invita aquí a un recorrido por lo más florido y granado de los suburbios de San Francisco: tras pasaros el tiempo recorriendo localidades como Burbank, Pomona, Culver City y Tijunga (donde, buscando un poco, podréis encontrar la casa de Elliot y sus hermanos, en el 1721 de Lonzo Street), tanta sobredosis de casitas idénticas y high schools con aula de vivisección, sólo aliviada por los ocasionales bosques de secuoyas  os hará exclamar “Mi caaaaasa…” cual si fuerais alienígenas perdidos en la Tierra.