¿Quieres tener hijos? Antes mira estas películas

Tener hijos o no tenerlos es una elección más en la vida. Que no os engañen. Es un camino que podéis escoger o no, como tener pareja o no, casarse o no casarse, ira a la universidad o no ir, ser vegano o no serlo… Todo depende necesariamente de una cosa: Haz lo que te dé la gana.

Dicho esto, no queremos desanimar a nadie que quiera tener hijos. Es maravilloso, seguro que sí. Pero sí queremos subrayar que es durísimo, que duele (duelen), que es te cambian la vida… ¿para bien o para mal? Da igual, te la cambian. Y la verdad es que el cine suele endulzar la maternidad y la paternidad como algo glorioso, tierno, edificante… Una clase de éxito, de meta consolidada objetivamente por nuestra especie.

En una crítica a Malas madres de la periodista Henar Álvarez para Él confidencial deja bastante claro que el cine no ha ayudado para nada a transmitir la realidad de un asunto tan serio como la maternidad: “A juzgar por la inmensa mayoría de libros y películas que he consumido,esperaba que el embarazo fuera un momento dulce, que la maternidad conllevara el final de todos mis problemas, que el resto del mundo me importara más bien poco en el momento en que tuviera un niño entre los brazos, que me saldría solo renunciar a mi vida personal para estar siempre a su disposición. Pero nada de esto ha sucedido. Nos adoctrinan para que entreguemos nuestra vida a la crianza y los cuidados de quienes nos rodean y luego no se nos permite quejarnos”.

Y así es. Sin embargo, sí que hay películas donde para nada se endulza el embarazo y la maternidad… Por ejemplo la recién estrenada Tully, una cinta de Jason Reitman con guión de Diablo Cody en el que una madre con tres hijos, el último un recién nacido, recibe la visita inesperada de una niñera que va ayudarla por las noches.

Hay pocas películas que tengan una mirada tan sincera sobre la maternidad como Tully, pero las hay y en este informe te traemos unas cuantas:

MALAS MADRES

Hay que revindicar esta comedia tonta. Tonta porque está compuesta en su mayoría por chistes simplones y sin embargo, en su conjunto no para de desafiar la terrible norma dictada por la sociedad en la que si te quejas de estar harta de tus hijos o si dices que de vez en cuando los odias un poquito eres mala madre. EN ABSOLUTO.

Las tres madres protagonistas de esta película interpretadas por Mila Kunis, Kathryn Hahn y Kristen Bell aman a sus hijos por encima de todo pero, como cualquier ser humano, también aman muchas otras cosas. Y no podemos culpar como en algún que otro momento prefieren ser atropelladas por un coche y resultar levemente heridas solo para poder disfrutar de unos días de soledad en el hospital.

Consejos para los futuros padres: No pasa nada si mandas a la mierda el sistema. Si no sigues las reglas establecidas por los talleres de madres y padres primerizos. No pasa nada si fracasas como madre. Es muy complicado, asúmelo.

TENEMOS QUE HABLAR DE KEVIN

Esta película trata un asunto muy complejo. Exagerado pero lo suficientemente bajado a la vida real como para crear un estimulante debate sobre la influencia de una madre en la personalidad de un hijo.

Poco se habla de lo injusta que es la maternidad en ese aspecto. Una madre puede tener un millón de gestos cariñosos con su hijo, ser paciente, comprensiva, generosa y buena… Sin embargo, cuando el hijo crezca no se acordará de la mayoría de estos gestos. Eso sí, una frase mal dicha, una regañina mal gestionada, un reproche exagerado pueden traumatizar para siempre a un niño hasta cambiar su personalidad. Es injusto, claro. Nadie debería tener tanta responsabilidad sobre un ser humano.

De esto habla esta película en la que una madre sufre durante la maternidad de su primer hijo una crisis de identidad que deriva en un comportamiento poco maternal, que, sumado a que el hijo es un psicópata de libro acaba por ocurrir lo inevitable. El nacimiento de un asesino.

LOS CHICOS DE MI VIDA

Drew Barrymore hace la interpretación de su vida en esta película en la que interpreta a una adolescente que se queda embarazada los 60 y que no puede hacer otra cosa que sucumbir a la presión social y abandonar sus sueños de ser escritora para ser esposa y madre.

Los chicos de mi vida es una comedia pero su mensaje es amargo. El mensaje de la película parece ser que da igual lo que una madre o un padre quiera para sí mismo porque en el momento de estar embarazados las decisiones deben girar en torno al hijo. Esto, claro es falso y terrible, pero la película nos da una idea de la presión social a la que somos sometidos cuando tenemos hijos. Todo el mundo opina sobre nuestros sueños, nuestras ambiciones laborales…

EL CLUB DE LA BUENA ESTRELLA

Esta película de Wayne Wang nos habla de un grupo de mujeres que se reúnen para huir aunque sea durante unos instantes del drama que viven a diario. Aunque uno de estos dramas es la maternidad es justo decir que uno de sus más fervientes anhelos es que sus hijas no hereden el mundo en el que ellas viven.

Esta película retrata una hermandad de mujeres que luchan con el estado patrialcal de la sociedad. Ese que les obliga a ser felices con la maternidad cuando esta está llena de frustraciones y momentos amargos. Como todo en la vida, solo que en este caso quejarte te convierte en mala persona.

UN FELIZ ACONTECIMIENTO

Esta es, sin duda la película perfecta para ver cuando estáis embarazados o lo estáis pensándolo. Rémi Bezançon adaptando una novela de Eliette Abecassis cuenta con la misma naturalidad los pros y los contras de la materindad.

Tener un hijo te cambia la vida pero también es extenuante y asusta que no veas.

La película trata con humor el calvario que vive una pareja de padres primerizos que estaban felizmente solteros y sin hijos. Es divertida, realista y una guía maravillosa para quién ha decidido tener vástagos.

THE BABADOOK

Bueno, esta película no es exactamente sobre la maternidad. Es un cuento gótico de terror sobre la relación de una madre con su hijo. Pero sí que merece la pena desgranar una de las tesis que propone Babadook.

Una madre viuda y su hijo viven juntos y solos. El niño tiene algo así como manías violentas, colecciona armas, vive acongojado. Babadook es un monstruo que le acecha y la madre lo conoce pero apenas habla de él. ¿Quién es Babadook? Babadook es la propia madre en su forma más oscura, rencorosa, terrible y violenta. La versión de ella que odia a su hijo. En el caso de la película es por haber sido una de las causas de la muerte del padre pero en la vida real puede ser un sueño truncado, un trabajo perdido, un matrimonio destruido…

Hay que evitar que salga el Babadook y la mejor forma de hacerlo es asumir que la maternidad es dificilísima y que aunque amemos incondicionalmente  a nuestros hijos no pasa absolutamente nada si sentimos que los queremos perder de vista un rato, o si pedimos ayuda o si a pesar de todo lo que nos han dicho hay cosas que nos siguen gustando tanto o más que la maternidad.