9 cosas que hacen de ‘Cuenta conmigo’ un clásico de los 80

Hacia el final del verano de 1959, Gordie LaChance y sus amigos Chris Chambers, Vern Tessio y Teddy Duchamp, cuatro chavales de Castle Rock, un pequeño pueblo de Oregon, deciden ir en busca del cuerpo de un joven muerto. Cuenta conmigo, dirigida por Rob Reiner en base a una historia de Stephen King, parece que no explique mucho y sin embargo es una película que habla de muchas cosas: en una década, la de los 80, que se volcó como ninguna en los relatos de y para adolescentes, el largometraje de Reiner se ganó un hueco en los corazones de los espectadores de medio mundo gracias a su historia, sencilla pero profunda, y a sus protagonistas, interpretados por unos jóvenes actores que lograron dotar de un carisma único a los personajes que interpretaban.

Hoy muchos recuerdan esta película por los muchísimos elementos que una serie como Stranger Things le debe, pero Cuenta conmigo -que costó la modesta cifra de 8 millones de dólares y logró en taquilla casi 53 millones en todo el mundo desde que se estrenara en agosto de 1986- es mucho más que una fuente de inspiración cinematográfica para los creadores que miran hacia atrás para dar con fórmulas de éxito, sino también un clásico sobre la adolescencia que, ahora que cumple 30 años, recordamos como merece.

1- Está basada en una historia de Stephen King

Publicada en 1982 e incluida en el volumen Las cuatro estaciones, El cuerpo (The Body) es el título de la novelita de Stephen King que adapta Cuenta conmigo, una historia basada asimismo en las propias experiencias de jovenzuelo del escritor. Para King se trata de uno de los libros más significativos a nivel personal y, por fortuna, la versión cinematográfica de Reiner es la película basada en alguna de sus obras que más le gusta. Aunque el largometraje de Reiner es bastante fiel a lo que cuenta el libro y a su estructura, Reiner, junto a los guionistas Bruce Evans y Ray Guideon, realizó unos cuantos cambios, especialmente en los personajes de Gordie y de Chris. No pareció salir mal la jugada: Evans y Guideon fueron nominados al Oscar al mejor guión adaptado al año siguiente.

2- Sin Rob Reiner, unos cuantos mitos del cine de los 80 no existirían

"Me llamo Iñigo Montoya. Tú mataste a mi padre. Prepárate a mori", "Este [amplificador] llega hasta el once" o el orgasmo más famoso del cine reciente forman parte de la filmografía de Rob Reiner, un nombre que sólo por esos momentos cinematográficos citados ocupa un puesto honorífico en la comedia estadounidense de los años ochenta. Hijo del actor, director y productor Carl Reiner y de la cantante y actriz Estelle Lebost, el cineasta comenzó en Hollywood como actor de televisión en la serie The Dick Van Dyke Show, creada por su padre, para lograr cierta popularidad gracias a la sitcom Todo en familia. Cuando decidió ponerse al otro lado de la cámara, Reiner, así, tenía experiencia en el ámbito de los actores y su buena mano en la dirección de intérpretes es una característica común en todos sus filmes. Sobre todo en Cuenta conmigo.

3- Cuatro chicos y una amistad

Gordie LaChance, Chris Chambers, Vern Tessio y Teddy Duchamp o lo que es casi lo mismo Wil Wheaton, River Phoenix, Jerry O'Connell y Corey Feldman son los protagonistas absolutos de Cuenta conmigo y también los responsables de buena parte de su éxito. Es difícil encontrar incluso hoy en día un reparto de chavales tan bien escogido y tan compenetrado (a excepción de la serie Stranger Things, a cuyos niños protagonistas, por cierto, les hicieron las pruebas de casting con extractos de la película de Rob Reiner), y cuando el personaje de Richard Dreyfuss suelta, ya hacia el final de la película, que nunca ha vuelto a tener amigos como los que tuvo cuando tenía doce años, sabes que no miente a tenor de la viveza con la que los chicos interpretan todo lo que les sucede en la cinta.

Reiner escogió a los cuatro protagonistas de entre 300 candidatos y para conseguir esa camaradería se limitó a pasar toda la semana previa a los ensayos de guión jugando. Wheaton explica en The Wrap, con motivo del 30 aniversario de la película, que “parte de la grandeza del filme es que él [Reiner] escogió a chicos que en esencia eran muy parecidos a los personajes que interpretaban”.

4- ‘Cuenta conmigo’ fue la película que lanzó a River Phoenix

En Cuenta conmigo, Phoenix interpreta a Chris Chambers, el chico que proviene de un entorno familiar problemático y que quiere liberarse de las etiquetas, a pesar de tener muy claro que los prejuicios caen sobre él como una losa. Es carismático, gracioso y tiene una amistad especial con Gordie LaChance, el protagonista. En ese reportaje en The Wrap, Wheaton, que encarnaba a Gordie, dice de River Phoenix: “Me gustaba de veras River. Le admiraba. Era una persona que de manera inmediata te gustaba y querías que tú le gustaras a él. Era amable y había algo tranquilo en él. Emitía una cierta sabiduría”. Phoenix ya había dado el salto al cine con Exploradores (1985) de Joe Dante, pero fue Cuenta conmigo la que forjó su imagen de rebelde tierno que lo acompañó en su breve pero intensa carrera cinematográfica.

5- Y consolidó a Kiefer Sutherland como perfecto villano

Kiefer Sutherland debutó en el cine siendo niño acompañando a su padre en el largometraje Hola, Mr. Dugan (1983), pero demostró sus verdaderas dotes para encarnar a inquietantes villanos gracias a su papel de Ace Merrill, el líder de la banda de los Cobras, en Cuenta conmigo. De hecho, los cuatro chavales protagonistas le tenían algo de miedo a Sutherland, máxime cuando el actor intentaba mantener esa pose de malote frente a ellos incluso fuera del set. Tras Cuenta conmigo, vendría otro estupendo malvado en Jóvenes ocultos (1987) y una larga carrera en cine y televisión. El personaje de Merrill, por cierto, vuelve a aparecer en otra novela de King, La tienda, que tuvo su pertinente adaptación cinematográfica en 1993 con Max Von Sydow y Ed Harris.

6- Vívida adolescencia

Además de líneas de diálogo tan descacharrantes como las de la secuencia de imágenes de arriba, en Cuenta conmigo la adolescencia aparece reflejada en toda su viveza y, paradójicamente, teñida de una intensa melancolía. No hay que olvidar que la película responde al recuerdo que tiene el LaChance adulto cuando evoca sus años de juventud, pero los cuatro protagonistas -los cuatro un poco nerds, un poco raros y un poco marginados- parecen tener todos una sensibilidad poco habitual de ver en pantalla.

7 – Iniciación a la vida y encuentros con la muerte    

Cuenta conmigo no sólo funciona como película de aventuras de cuatro chicos durante el final de un verano, sino que es un relato de iniciación diáfano que logra capturar el momento previo al salto al mundo adulto. Las conversaciones de los cuatro amigos primero giran alrededor de bromas y chancas cotidianas, pero una vez descubren el cuerpo muerto del joven que habían ido a buscar, y tras un viaje repleto de pruebas, confesiones y unas cuantas carreras, saben, de un modo u otro, que tras esa experiencia con la muerte han dejado atrás la niñez para siempre.

8- Oda a la imaginación (y al ‘storytelling’)

El protagonista de Cuenta conmigo, Gordie LaChance quiere ser escritor, aunque, como vemos en la película, no tiene demasiada confianza en sí mismo, a pesar de lo mucho que lo apoyan primero su hermano mayor, que sabemos que ha fallecido, y luego su amigo Chris Chambers. Pero, tal y como demuestra en uno de los momentos más antológicos del filme, talento no le falta y la historia de la venganza de "Culograsa" merece ser incluida entre lo mejor de la película.

9- La banda sonora de una época

The Chordettes, Jerry Lee Lewis, Buddy Holly, The Coasters y, claro, Ben E. King y su Stand By Me, son algunos de los nombres de la banda sonora que acompaña a los cuatro amigos durante la película y que, además, define como pocas un momento muy concreta: los últimos años de la década de los 50. Cuenta conmigo es, en este sentido, de los últimos trabajos que, durante los años ochenta, se fijaron en esa década (Regreso al futuro (1985) de Robert Zemeckis, o Peggy Sue se casó (1986) de Francis Ford Coppola, son otras cintas importantes de entonces que también volvieron la vista atrás en el tiempo) para intentar congelar, no sin cierta nostalgia, una cierta emoción ante una época de fuertes connotaciones en el espíritu estadounidense. Aunque es bastante discutible sobre si esos tiempos pasados fueron mejores, no cabe duda que dejaron un gran legado musical.