30 aniversario de 'La maldición de las brujas': La mayor convención de hechicería celebrada

La Gran Bruja reúne a las demás en una gran convención internacional, donde dialogan sobre la mejor forma de convertir a todos los niños de Inglaterra en ratones. Han pasado 30 años desde que esta icónica escena se convirtiera en uno de los distintivos cinematográficos de fantasía de los años 90, y aún recordamos espeluznados la divertida transformación de estas bellas hechiceras en monstruos calvos y deformes.

En 1990, Nicolas Roeg dirigía La maldición de las brujas (The Witches, en su versión original), la adaptación de la emblemática novela de Roald Dahl. El insigne escritor de reconocidos libros de nuestra infancia como Matilda, El gran gigante bonachón o Charlie y la fábrica de chocolate colaboró en un principio en el título, el cual recibió la aclamación entre la crítica, no así de la taquilla. Sin embargo, el autor quedaría horrorizado con el resultado final, al considerar que los productores habían sido "vulgares" y tenían "mal gusto", transformando su obra de fantasía en "verdadero terror".

El británico pidió que su nombre fuera retirado, así como exigió un cambio en el título del filme. Unas palabras que se transformarían finalmente tras recibir una carta de disculpa del propio Jim Henson, quien estuvo detrás de la creación de este proyecto.

El titiritero y productor estadounidense Jim Henson ya había participado en filmes como La película de los Teleñecos, Cristal Oscuro o Dentro del laberinto. Todos clásicos inequívocos en la actualidad. Para ello, este delegó la realización en Roeg. Sin embargo, la tragedia asolaría tanto su vida como la de Dahl después de hacer las paces. Henson fallecía días antes del estreno de la película, debido a una bacteria llamada estreptococo, la cual fulminó a este de forma acelerada. Por su parte, después de su confrontación, Dahl prohibió que se adaptaran nuevas obras suyas mientras él viviera. Sin embargo, los avatares del destino hacían que pocos meses después, el 23 de noviembre, el novelista de narraciones infantiles falleciera debido a la leucemia.

The Witches (1983) fue sin duda una de las obras más controvertidas de Dahl, quien fue acusado de misoginia al mostrar el papel de las mujeres como villanas. Este hecho se trasladaría incluso a través del tiempo en la película, donde un error en la producción de extras hacía que estuviera plagada de hombres, algo que a simple vista podía ser advertido por el ojo del espectador. Sin embargo, la polémica sería superada y quedaría atrás tras el lanzamiento del filme, que haría que el libro se convirtiera en un imprescindible en las bibliotecas estudiantiles de todo el mundo.

Gran parte de este cambio de opinión fue gracias a la fortaleza de la interpretación de su protagonista: Anjelica Huston. La intérprete dejaba prendado a medio mundo con su mal carácter y su conspiración infanticida. Dahl participó en la selección directa del personaje principal de la Gran Bruja, papel para el que quería una cara reconocida. La primera opción fue Cher, pero esta rechazaba el proyecto al estar inmersa en la producción de Sirenas. Otros nombres que sonarían fuerte serían los de Susan Sarandon, Liza Minnelli, Helen Mirren o Sigourney Weaver. Finalmente, el personaje recaería en Huston, con una carrera en ascenso.

Reconocida por ser la hija del gran cineasta John Huston, Anjelica ya tenía grandes éxitos a sus espaldas tras títulos como El cartero siempre llama dos veces (Bob Rafelson) o El honor de los Prizzi (bajo la dirección de su propio padre). Además, Anjelica era una actriz muy querida y admirada por su vida pública, la cual compartía en ese momento junto al también reconocido actor Jack Nicholson. De hecho, este ya tenía experiencia anterior con hechiceras después de su participación en Las brujas de Eastwick (George Miller, 1987).

Huston vería recompensada su labor en La maldición de las brujas con diversos galardones, entre los que destacan los premios a mejor interpretación femenina en la Asociación de Críticos de Boston, la Asociación de Críticos de Los Ángeles y la Asociación Nacional de Críticos de Estados Unidos. Su rol en el título terminaría por convertirse en uno de los más queridos de la actriz a día de hoy.

El actor Robert Atkins llegaría a la producción como Mr. Stringer, el dueño del hotel. Ese mismo año, el intérprete británico daba a conocer al mundo su papel como el queridísimo Mr. Bean, reconocido por sus torpezas. De hecho, durante la producción este se metería ya dentro de la piel de este personaje al liarla en el set, causando una inundación. Esto se produciría después de que se olvidara de cerrar los grifos de su habitación antes de dormir. ¿Las consecuencias? Una fuga que afectaría a los eléctricos del equipo.

No sería el único hecho curioso en relación a la producción, puesto que la censura azotaría el lanzamiento en Reino Unido. Allí dos de las escenas más recordadas (y que puedes ver en esta misma noticia) eran recortadas para que el título fuera para todos los públicos y no causara conmoción entre los niños. Ver para creer. Qué pensaría el irreverente Mr. Bean de este hecho.

En la actualidad, Huston guarda un buen recuerdo de este rol y siempre que puede lo rememora. Una de las anécdotas más bonitas de la actriz surgen precisamente de su correspondencia hablando sobre la película con un grupo de jóvenes estudiantes españoles. En esos años, los alumnos de la escuela pública Camí del Mig de Mataró enviaron un regalo a la actriz a través de su profesora Lola Casas, autora de obras literarias infantiles. De esta forma, el obsequio consistía en un muñeco que cogía una novia en brazos- debido a su boda en esos momentos con Nicholson- y una carta felicitando a la actriz por La maldición de las brujas. Sorprendentemente, la actriz contestaba a la misiva con otra, iniciando así el correo con los alumnos. Y es que se trataba del momento álgido del gusto por las brujas.

Los 90 fueron escenario de un gran auge por el cine brujeril. Buena prueba de ello son títulos que se han consagrado como clásicos, como El retorno de las brujas y Jóvenes y brujas, que tienen en camino nuevos remakes. Era de esperar pues que La maldición de las brujas fuera traída de nuevo hasta nuestros días.

Hace poco conocíamos la existencia de una nueva adaptación del título, dirigida por Robert Zemeckis (Forrest Gump, Naúfrago). La nueva adaptación, llamada Las brujas, traslada la narración al sur de los Estados Unidos en los años sesenta. Allí veremos una vez más al niño y su abuela, cazadora de brujas de joven, enfrentándose a la Gran Bruja, quien quiere acabar con los pequeños de todo el mundo. El papel principal de la hechicera recae en esta ocasión en Anne Hathaway, quien estará acompañada de intérpretes como Olivia Spencer, Chris Rock o Stanley Tucci. El nuevo filme estaba fechado para octubre, algo que podría cambiar con la actual situación.