A Matt Damon también le gusta el fútbol

Bueno, en realidad a Matt Damon parecen gustarle todos los deportes. Aunque "gustar" puede que no sea el verbo más adecuado. Da la impresión de que los domina enfermizamente, o por lo menos esa es la historia que rescata el director de la revista británica EMPIRE en su carta del número de este mes septiembre.

El bueno de Mark Dinning, aprovechando que Damon estrena este mes Elysium [ver crítica aquí], recuerda una entrevista con el actor de unos cuantos años atrás, en 2000, cuando Matt Damon promocionaba La leyenda de Bagger Vance, aquella película de golf (deportista compulsivo, también hizo una de rugby: Invictus) más larga que el open Británico y dirigida por Robert Redford. Fue en Nueva York, en uno de esos hoteles pijos, no muy lejos de Times Square, justo el día en que la afición de los New York Yankees celebraba ruidosamente la consecución de las series mundiales de béisbol (la Liga, vamos, ellos lo llaman así) por las calles de Manhattan.

Para centrar el tema, resulta que Matt Damon se crió en Boston (allí nació en 1970) y es muy aficionado de los Red Sox (y de cualquier equipo de su ciudad, como los Celtics en baloncesto), el eterno y tradicional rival de los Yankees. Como si a un culé le pilla en plena Cibeles el día que el Real Madrid y su afición celebran una Champions League. Una depresión absoluta. Y al director de EMPIRE no se le ocurrió otra cosa hurgar en la herida...

–"Entonces, ¿cómo sienta eso de estar en Nueva York justo cuando los Yankees celebran su triunfo?"

[Damon le miró con cara de muy pocos amigos y ganas de arrearle, y le contestó bien contestado]

–"Tú eres británico, así que supongo que te gustará el fútbol (dijo "soccer", claro)".

–"Sí, me encanta".

–"¿De qué equipo eres?".

–"Seguro que nunca has oído hablar de mi equipo, créeme".

–"Ponme a prueba".

–"OK, pero que conste que te avisé: soy del Leicester City".

[Matt esbozó una sonrisa antes de contestar]

–"Bueno, en ese caso, supongo que la mejor forma de describir cómo me siento es recordar cómo te sentías tú hace un par de domingos".

–"¿Qué quieres decir?"

–"Ya sabes, después de que el Manchester United os ganó 3-0. O tal vez hace una semana, cuando el Liverpool os ganó 1-0. Supongo que me siento más o menos como tú te sentiste entonces".

Le está bien empleado. Al director de Empire y a nosotros, que nunca previmos que eso de llevar la camiseta de Boca Juniors para andar por casa era un aviso y tampoco hicimos mucho caso cuando le vimos en Stamford Bridge viendo un Chelsea-Arsenal junto a Paul Greengrass (dirigió a Damon en la segunda y la tercera pelis –las mejores– de la saga Bourne, y en Green Zone, y con un proyecto para hacer una peli del Barça parado desde hace algún tiempo).

Y para colmo, hace cinco días, en plena disputa de la Guinnes International Champions Cup (ese torneo que ha ganado el Real Madrid) en EE UU, Damon se fotografió con tres jugadores del Everton, con los que lució la camiseta del equipo que ahora entrena el español Roberto Martínez: Leon Osman, Leighton Baines y Kevin Mirallas.

Está bastante claro, ¿no?: Matt Damon 3 - Resto del mundo 0.

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