La próxima ceremonia de los Emmy podría no tener presentador

Hace unos pocos meses, los responsables de la ceremonia de los Oscar descubrieron que no hay mal que por bien no venga. Estaba previsto que Kevin Hart presentara el evento, pero el descubrimiento de unos tuits homófobos motivó su renuncia y que a sus jefes no les diera tiempo a encontrar sustituto, de modo que la gala fue celebrada sin presentador. Resultado: unas cifras de audiencia nada desdeñables que podrían haber convencido a otra gran entrega de premios, los Emmy, de seguir una dinámica parecida.

Según revela Variety, la Academia de Artes y Ciencias de la Televisión estadounidense está estudiando que la próxima ceremonia no tenga anfitrión alguno, limitándose a los espectáculos y el reparto de galardones. En principio "nada ha sido decidido" de forma oficial, pero dicha decisión "está entre las opciones" y no sólo responde al precedente de los Oscar sino al empuje mediático de la inminente gala, envuelta en multitud de series célebres que han llegado este año a su final. Como Veep, The Big Bang Theory y, por supuesto, Juego de tronos.

Dado el previsible interés que acogería, puede que no sea necesario un presentador, lo que conduciría a un escenario sólo replicado tres veces antes: en 1975, en 1998 y en 2003, cuando la ceremonia aún se emitía en Fox. Este año los Emmys serán retransmitidos por la NBC al igual que el año pasado (cuando tuvo lugar una de las galas más lentas de las que se tiene memoria), y antes de confirmar si la celebración que tenga lugar el próximo 22 de septiembre tendrá presentador o no, quizá convendría reparar en las palabras de Jimmy Fallon.

El responsable del famoso late night ha hablado de su experiencia en estas lides, y su opinión es clara: "es un trabajo muy duro e ingrato". No es de extrañar que, por lo que parece, a los Emmy no les estén lloviendo los candidatos.