¿Habría mejorado el final de 'Perdidos' con un volcán?

Un combate épico, magma por todas partes, terremotos… El primer final planeado por Damon Lindelof podría haber sido más explosivo (y tal vez menos polémico)
¿Habría mejorado el final de 'Perdidos' con un volcán?
¿Habría mejorado el final de 'Perdidos' con un volcán?
¿Habría mejorado el final de 'Perdidos' con un volcán?

Posiblemente, el final de Perdidos sea el más discutido de la historia reciente de la TV. Tras seis temporadas, el último giro de guión que Damon Lindelof se guardaba en la manga resultó decepcionante para muchos espectadores, indescifrable para otros tantos, y una genialidad para una (¿amplia?) minoría. Sin embargo, la primera idea de Lindelof y su socio Carlton Cuse para rematar la historia de los náufragos hubiera sido mucho más explosivo.

Según han revelado Lindelof y Cuse en Entertainment Weekly (vía AV Club) el enfrentamiento final entre Jack Shephard (Matthew Fox) y el Hombre de Negro encarnado en Locke (Terry O'Quinn) habría tenido lugar en un volcán en erupción. La idea para ese colofón se planteó desde el principio de la serie, afirman, y los guionistas dejaron caer una pista en un episodio de la tercera temporada (en una clase de la Iniciativa Dharma donde la profesora explica la actividad de los volcanes).

Carlton Cuse, de hecho, llegó a buscar un auténtico volcán en Hawai donde ambientar la escena. Y, preparando la sexta temporada, le pareció que esa idea se ajustaba bien al concepto de la Isla. Según Lindelof: "La cuestión siempre fue: ¿cómo dramatizas la idea de que la Isla es lo único que separa al mundo del Apocalipsis? Y la respuesta era el volcán", explica Lindelof.  "Íbamos a empezar con montones de terremotos", añade Cuse. "Y todo conduciría a una gran pelea entre el bien y el mal, con Jack y el Hombre de Negro enfrentándose en medio de la lava. ¡Lava por todas partes!". 

¿Por qué no llegó a rodarse este final tan espectacular? Pues por qué va ser: por la pasta. ABC decidió que la escena sería demasiado cara, así como que transportar a todo el reparto a la localización elegida por Cuse sería un problema logístico. Y luego, añade Lindelof, estaba ese 'problemilla' llamado "precuelas de Star Wars": "Nos acordamos de cómo terminaba La venganza de los Sith, con esa batalla entre Anakin y Obi-Wan en el planeta volcánico. Al lado de aquello, cualquier cosa que nosotros hiciésemos parecería el ratón Mickey". Aún así, la duda está sobre la mesa: ¿hubiera funcionado mejor el final de Perdidos con más acción, y con un volcán escupiendo magma?

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