¿Cumplirías todas las leyes del instituto de 'The Politician'?

Desearías que (casi) todas fuesen de obligado cumplimiento en cualquier centro educativo, incluyendo la universidad.
¿Cumplirías todas las leyes del instituto de 'The Politician'?
¿Cumplirías todas las leyes del instituto de 'The Politician'?
¿Cumplirías todas las leyes del instituto de 'The Politician'?

Aunque los más escépticos dudaban que The politician –uno de los estrenos más esperados de Netflix en septiembre– fuese a encajar en su catálogo, la realidad es que la última ficción de Ryan Murphy es tan sagaz, irónica y entretenida como sus otras joyas, Glee o American horror story. De hecho, ya son muchos los que se han enganchado a sus tramas delirantes que, aunque tienen ese toque american teen que tanto cabrea a algunos espectadores, esconde una crítica encarnizada de la forma de vida que impera en EEUU: triunfar cueste lo que cueste en la tierra de las oportunidades.

Eso sí, aunque en ese caótico instituto todo lo inverosímil tiene cabida, hay una serie de leyes que deberían aplicar el resto de institutos de Netflix. ¡Menos uniformes molones y más orden!

Las leyes que sí hay que cumplir en The politician

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    Ley de trueque. “Se permite el intercambio de apuntes sin gastos de transacción”. Si Nadia y Valerio, de Élite, estuviesen matriculados en el instituto Saint Sebastian (SSHS) se hubiesen ganado a pulso una expulsión disciplinaria: ¡¡quienes se creen para sacar tajada de algo tan ético como compartir los apuntes (que tanto te ha costado hacer) con tus compañeros y amigos de clase!!

      Ley de soberanía. Deberá reconocerse absoluta autoridad al doble repetidor de curso”. Los chicos de Sex education conviven con una norma parecida. Pero, en lugar de ley de soberanía la podrían llamar ley de Adam Groff, el mayor matón de la historia de las series que, además, es el hijo del director de la Escuela Secundaria Moordale.

        Ley de igualdad de oportunidades. “El que tiene chicles deberá repartir entre sus compañeros”. Seguro que Cher, la protagonista de Clueless, no ponía ningún problema con esta norma. ¡Ella siempre tan dispuesta a ayudar y a compartir la fortuna de su padre!

          Ley de solidaridad. “La clase responde solidariamente sin chivarse, aunque pringuen todos”. ¿Sabéis cuando en Glee los más guais del William McKinley los ponen perdidos de granizado cada dos por tres? Pues esa es la descripción gráfica de “pringar todos” y asumir marrones que no te corresponden.

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