Cómo 'Stranger Things' podría salvar Netflix

La serie de los hermanos Duffer ha supuesto un éxito capaz de paliar los problemas económicos de la plataforma durante bastante tiempo.
Cómo 'Stranger Things' podría salvar Netflix
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Cómo 'Stranger Things' podría salvar Netflix

Dado el bombardeo semanal de contenidos, y la opacidad en la que busca bañar todas sus cuentas, es muy difícil saber a ciencia cierta qué tal le van las cosas a Netflix. La compañía presidida por Reed Hastings se las apaña para que ni nosotros dejemos de hablar de ella ni los medios quieran estar al tanto de cada uno de sus movimientos, pero unos recientes informes nos llevan a concluir que 2019 no está siendo un buen año para el gigante de streaming. O, al menos, no lo estaba siendo hasta que estrenó este verano la nueva temporada de Stranger Things.

Según un informe del Banco de América examinado por medios como Variety, en el segundo cuarto de este año Netflix registró su mayor pérdida de suscriptores desde 2011 en EE.UU.; correspondida con una caída igualmente preocupante en el extranjero. Además, en lugar de los 5 millones de suscriptores que esperaba conseguir a estas alturas del año, la plataforma sólo ha conseguido añadir 2.7 millones a sus cuentas.

A primera vista no son cifras demasiado alarmantes, por lo que hay que observar las circunstancias que rodean ahora mismo a la plataforma para hacernos una idea más definida. Con la recurrente amenaza de usuarios por abandonar su suscripción (debida, sobre todo, a la intempestiva cancelación de sus series favoritas) y, sobre todo, un panorama competitivo cada vez más intenso (con Disney+ y HBO Max vislumbrándose en el horizonte, y Amazon o Apple TV afianzando posiciones), no son buenas noticias para Netflix.

No obstante, este mismo informe señala un dato esperanzador, y es todo lo relativo a Stranger Things. El estreno de su tercera entrega coincidió con un 18% más de usuarios utilizando la aplicación móvil de Netflix, incrementándose hasta el 30%, y los expertos no abrigan dudas de a qué se debe. En julio de este año, Cowen & Co. descubrió que un 13% de antiguos suscriptores planeaban volver a recurrir al servicio paralelamente al regreso de la ficción de los Duffer, y otros muchos también iban a hacerlo específicamente para ver la serie.

Debido a estos comportamientos, no sorprenden las apoteósicas cifras que Stranger Things alcanzó a su estreno, reuniendo 12.8 millones de espectadores en los primeros 4 días. Una victoria que Netflix necesitaba desesperadamente tras un año complicado, y que ofrece perspectivas algo más optimistas para el futuro. No tanto porque parece que sigue habiendo Stranger Things para rato, sino por lo que esto significa para la oferta original de la plataforma, y sus opciones de salvaguardar su identidad.

A la hora de mantener a la audiencia, Netflix siempre ha confiado mucho en productos de probada efectividad como FriendsThe Office, pero estos contenidos están siendo absorbidos por las corporaciones de las que partieron para ingresar en sus propias plataformas de streaming. Ante el crecimiento de estas, a Netflix sólo le queda confiar en su propia oferta original, de la que Stranger Things supone un estandarte inmejorable, al tiempo que una prueba de su habilidad para mantener la atención.

Otra forma de conservar la hegemonía pasa por las audiencias extranjeras, que Netflix trata de conservar mediante las producciones de lengua extranjera. En lo que llevamos de 2019, según recopila The Guardian, el servicio ha llegado a producir hasta 100 programas de lengua no inglesa, lo que supone un buen precedente de cara a fortalecer su arraigo en estos países.

Combinándose con el incombustible atractivo de Stranger Things, es posible que Netflix esté mucho más preparada para combatir con Disney+ a su llegada el 12 de noviembre de lo que pensamos.

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