7 comedias revelación de 2014

El año que viene promete ser fabuloso para los amantes de la comedia televisiva. Veremos la esperada The Last Man on Earth de Will Forte con dirección de Phil Lord y Chris Miller (Infiltrados en clase, La Lego película), Tina Fey estrenará Unbreakable Kimmy Schmidt protagonizada por Ellie Kemper y la hilaridad con poso amargo seguramente estará bien cubierta gracias a la Better Call Saul de Vince Gilligan y Bob Odenkirk, sin olvidar el regreso de instituciones del género como Parks and Recreation (para despedirse, snif) o Community. Pero eso no significa que 2014 haya sido un año más flojo en cuanto a risas en el panorama catódico. Todo lo contrario: hemos asistido al nacimiento de un puñado de magníficas comedias que, con intenciones y tipos de humor muy diversos, aseguran por sí solas el relevo incesante del género. Estas son las que debes recuperar sin falta.

Hasta ahora, Andy Daly era una de esas promesas invisibles esperando un momento de gloria para explotar el potencial demostrado en sketches para MADtv y secundarios robaescenas de The Office y, sobre todo, Eastbound & Down. Ya nunca más, pues Review es su consagración definitiva. Este remake sigue el mismo esquema de su fuente original australiana: es un programa de reseñas donde el crítico todoterreno Forrest MacNeil experimenta y hace valoraciones de las experiencias más variopintas de la existencia. Eso incluye comerse 15 tortitas, salir de caza, ir a un baile de graduación, ser racista, divorciarse o ser Batman. Todas ellas, con su valoración crítica de 1 a 5 estrellas al final. La gran comedia del año.

Es imposible reducir Rick and Morty al género de comedia, porque la serie de animación de Justin Roiland (Hora de aventuras) y Dan Harmon (Community) trasciende la división por géneros de forma activa en cada uno de sus maravillosos 11 episodios (los primeros comenzaron a emitirse en 2013, pero con tal onda expansiva que no tenemos ningún reparo en nombrarla como lo mejor que ha dado la televisión de 2014 y punto). Digamos que el terreno de juego más claro para sus explosiones de imaginación y guasa afilada es la ciencia-ficción y sus ideas más delirantes, siempre exprimidas hasta el máximo de sus posibilidades (y luego media vuelta más) en cada una de las aventuras de esta pareja de nieto zopenco y abuelo científico chiflado siempre al borde del vómito etílico que dejan las paradojas espacio-temporales de Marty McFly y Emmett Brown en la cuneta. En España la emite TNT.

Frente al solipsismo narcisista en el que suelen caer más a menudo de lo que nos gustaría Lena Dunham y sus Girls, las irreverentes y deslenguadas Ilana Glazer y Abbi Jacobson han aportado el contrapunto necesario con su propia visión de la juventud y la amistad femenina hoy en día en Nueva York. El segundo bombazo del año para Comedy Central procede de la webserie homónima con la que estas dos humoristas se dieron a conocer y, bajo el madrinazgo de Amy Poehler, no han perdido ni un gramo de frescura, inmediatez, facilidad para los diálogos desopilantes y los secundarios insólitos. Su segunda temporada comienza el próximo 14 de enero.

Ante el empuje de Broad City, el otro gran estreno de pareja cómica femenina procedente de internet que representa la serie del dúo musical formado por Riki Lindhome y Kate Micucci ha quedado más eclipsado y sin apenas repercusión entre los aficionados al humor televisivo. Quizás se deba a su caracter en apariencia bastante más contenido y amable, aunque no por ello carente de filos bajo la superficie de cuteness pop, o la inevitable comparación con Flight of the Conchords debido a su esquema de intercalar la narración de cada episodio con canciones, pero da algo de pena que las pobres Garfunkel y Oates pasen tan desapercibidas. A ver si el canal IFC les da una nueva oportunidad y pueden expandir un poco más su propuesta con una segunda temporada.

Compartiendo podio con Nick and Morty y la deliciosa miniserie otoñal Over the Garden Wall de Patrick McHale, la apuesta animada dentro de la producción propia de Netflix a cargo de Raphael Bob-Waksberg cierra un año excelente para las revelaciones en el campo de la animación. A pesar de la familiaridad formulaica de un planteamiento argumental que nos lleva a seguir las tribulaciones de una antigua estrella de la televisión —quien además es, ehem, un caballo— que hoy en día vive de las rentas y la autoindulgencia hacia su miserable personalidad distorsionada por la fama, los guiones con los que se desarrolla al protagonista —a quien pone voz Will Arnett (Arrested Development)—, su compañero de piso —un magnífico trabajo de doblaje de Aaron Paul— o la escritora encargada de sus memorias (Alison Brie) llevan la serie por caminos mucho más estimulantes y, desde luego, hilarantes.

En 2011, la BBC puso en marcha la serie Twenty Twelve como retrato satírico del equipo encargado de comunicación del comité de organización de los Juegos Olímpicos de Londres 2012. En W1A nos encontramos con el mismo protagonista encarnado por Hugh Bonneville, ahora en su nuevo trabajo dentro del Comité de Valores de la propia BBC. Son las oficinas de la cadena las que sirven como marco para una serie de calamidades laborales en la línea de The Office, donde la capacidad autocrítica de la televisión británica queda una vez más de manifiesto. ¿El gran acierto de este spin-off? Recuperar también a la publicista atolondrada y superficial interpretada por Jessica Hynes (Spaced) en la serie anterior.

Los fans de Emily Mortimer a los que, sin embargo, se nos suele atragantar el resto de The Newsroom recibimos con los brazos abiertos el estreno de este proyecto de la actriz británica en colaboración con su amiga Dolly Wells. Interpretando versiones ficcionales de sí mismas, cuentan cómo la segunda comenzó a trabajar como asistente personal de la primera, dando pie a incisivas caricaturas de la industria del espectáculo —imposible no recordar Extras en ese aspecto— y bastantes tazas de humor incómodo. Por si fuera poco, Azazel Jacobs firma la dirección de todos los capítulos.