Green Zone: Distrito protegido

OBAMA ES UN CHOLLO. La excusa perfecta. Va a resultar que con el viento a favor de la administración del Yes, we can, incluso hacer cine es más fácil. Pero sólo por variar, casi apetece encontrarse una renovada versión de aquel Boinas verdes de John Wayne que intente justificar lo injustificable: la realidad. Un poco de caña, algo de tralla para salir del cine indignados. Porque esto ya nos lo sabemos. Y ya no tiene tanto mérito. Había que haberlo contado antes. Por supuesto, la ración de profesionalidad, emoción, despliegue de efectos y el buen hacer de un Matt Damon que hizo la mili en las escenas de acción de Casablanca en el tercer Bourne están aseguradas, pero un poco en plan rancho, con barra libre de explosiones y proyectiles.

A Hollywood, como el valor al recluta, la estampa se le supone. Y al callejero viajero Greengrass, más. Sin embargo, esta vez está demasiado preocupado por sintonizar con la opinión pública bienpensante y Brian Helgeland ya se ha quitado la careta. A este guionista le salió L.A. Confidential y vive de las rentas desde entonces (Mystic River ya estaba en el libro). No por casualidad firmó Destino de caballero. Quizá por eso, este ‘Bourne se va a la guerra’ les ha salido algo más blandito de lo que pensaban. Una película de buenos y malos, trepidante, sí, pero con una ambientación algo vista, que remite a Black Hawk derribado, todo tan naturalista, de un polvoriento Déjeuner sur l’herbe en tiempo de guerra, que resulta creíble, pero menos: con En tierra hostil tan reciente, Green Zone se convierte en la película menor de una sesión doble para los muy cafeteros (versión no soluble: en eso se ponen de acuerdo) de la guerra de Irak.

A Jason Bourne, o a su primo subofi cial del ejército invasor, Roy Miller, le han cortado las alas. La insurrección se le queda corta, y los tejemanejes del gobierno Bush no le permiten lucir tan esplendoroso como cuando jubiló a James Bond. Aquí corre, pelea y se arriesga, pero no puede ni con el vetusto coronel Dax de Senderos de gloria. Que una cosa es criticar en abstracto el eterno imperialismo

yanqui, y otra (¿De verdad hubo dos bandos en Washington ante las armas de destrucción masiva?) es meterse con la administración Bush. La cosa más fácil del

mundo. En 2010.

Carlos Marañón

FICHA TÉCNICA

Green Zone: Distrito protegido

• Director:
• Género:
• País:
• Sinopsis:

  Un soldado del ejercito de EE UU se enfrenta en Bagdad a una misión en solitario relacionada con las armas de destrucción masiva.

• RESUMEN: Obama es un chollo. La excusa perfecta. Va a resultar que con el viento a favor de la administración del 'Yes, we can', incluso hacer cine es más fácil.

• ESTRENO: 12/03/2010

• EE UU - REINO UNIDO - FRANCIA - ESPAÑA / 2010 / UNIVERSAL. DIRECTOR: PAUL GREENGRASS ACTORES: MATT DAMON, JASON ISAACS, AMY RYAN, BRENDAN GLEESON, GREG KINNEAR GUIÓN: BRIAN HELGELAND, RAJIV CHANDRASEKARAN FOTOGRAFÍA: BARRY ACKROYD MÚSICA: JOHN POWELL