Que el rodaje de X-Men: Fénix Oscura no fue un camino de rosas lo sabemos de sobra: con tanto reshoot y tanto aplazamiento de la fecha de estreno, la posible despedida de Fox de la saga mutante parecía haber sido planificada por el Juggernaut, en el mejor de los casos. Pero lo que desconocíamos hasta ahora es que los problemas a pie de plató no habían sido solo técnicos, sino también personales. Sophie Turner, la intérprete de Jean Grey, admite haber tenido trifulcas con un compañero de reparto a quien prefiere no mencionar.
En una entrevista con la revista Glamour (vía The Playlist) junto a Maisie Williams, su amiga y compañera de Juego de tronos, Turner señala que un actor de la película la miraba con tan malos ojos que acabó marchándose del plató cuando tenían que rodar un diálogo juntos. Así pues, uno de los guionistas tuvo que sustituir al desertor haciendo de stand in para que Turner pudiese acabar la escena.
"Tengo el gran problema de no saber marcar mi territorio, especialmente si estoy discutiendo con un hombre", admite Turner. Menos mal, prosigue, que Jessica Chastain estaba allí para ponerle las pilas: "Jessica me dijo: '¡Tienes que hacerte respetar! ¡Ve a por él y dile algo!". Así, aunque Turner sigue describiéndose a sí misma como "una tímida y una blandengue", al menos pudo replicar a aquel compañero tan desconsiderado.
Ahora solo toca preguntarse cuál de los actores de Fénix Oscura le hizo el feo a Sophie. ¿Michael Fassbender? ¿James McAvoy? ¿Tye Sheridan? Esperemos, en todo caso, que todo haya quedado como un mal paso, porque las consecuencias de cabrear a Fénix suelen ir del cataclismo planetario para arriba.
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