'Vengadores: Endgame': El mejor chiste de la película provocó amenazas de muerte a un guionista

Viernes. El día después del estreno de Vengadores: Endgame. Si has hecho click en este enlace es porque o bien te dan igual los spoilers, o bien eres uno de los afortunados que ayer estuvieron en el cine viendo la secuela de Vengadores: Infinity War.

Si ninguno de esos son tu caso y quieres escapar antes de vivir un spoiler de la película-evento del mes, descuida, puedes escapar con este enlace o con este otro.

Vamos a darte unas líneas y un GIF para que no leas nada, y nos quedamos tranquilos...

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Vale, los que sean lectores habituales de cómics Marvel en general y del Capitán América en particular pueden que hayan notado varios guiños en Vengadores: Endgame a algunas de las últimas etapas del personaje. La película de los Russo es generosa en citas al héroe de las barras y estrellas e incluso se permite un chiste, como el del ascensor, que para un guionista tuvo poca o ninguna gracia.

Para contar esta historia remontémonos al 2016, momento en el que se relanzan las historias del personaje con una cabecera llamada Captain America: Steve Rogers, que ofrecía la otra cara de la moneda de Captain America: Sam Wilson (en España, las dos colecciones se publicaron juntas), que llevaba publicándose un par de meses y en la que el Halcón se convertía en el nuevo Centinela de la Libertad. La serie fue recibida entre vítores por el ala más ultraderechista y conservadora de EE. UU., que corrieron a por el cómic buscando ajustar cuentas con una Marvel que había decidido hacer que un afroamericano fuera el heredero del escudo (Esto tampoco era la primera vez, pero bueno, nunca es tarde para ofenderse en Twitter).

Eso sí, la Casa de las Ideas y el Capitán América (que siempre ha sido el héroe progresista de la factoría) tenían un regalo envenenado para muchos de estos lectores. En su última página de este primer número, el Capitán sorprendía a los lectores con un HEIL HYDRA. Y no, no era ninguna broma. A lo que llevaba la historia del guionista Nick Spencer era a explicar que el Capi había sido siempre un infiltrado de Hydra y que ahora había llegado el momento de que desvelara la verdad.

¿Que supuso esto? Pues que Nick Spencer se convirtiera, según sus propias palabras, en "el hombre más odiado de Estados Unidos", y a que la broma empezara a dejar de serlo cuando sus redes sociales se vieron inundadas de amenazas de muerte. La mayoría terminaron siendo borradas por los fans, que acosaron día y noche al escritor, al que acusaban desde todos los flancos, con gente que le acusaba de traicionar el legado de Kirby y Simon (dos judíos que ahora veían a su personaje convertido en nazi) a los que decían que había plegado a los "globalistas" convirtiendo en villano al icono de los EE UU.

¿Que cómo terminó aquello? Pues con una de las grandes sagas de la actualidad de Marvel, Imperio Secreto, en la que se recogían ideas tan antiguas como cuando el Capitán se enfrentó al Watergate y en la que, Oh, sorpresa, Steve Rogers levantaba el martillo de Thor.