Tilda Swinton y la directora Ann Hui recibirán el premio honorífico en el próximo Festival de Venecia

La industria del cine no solo ha sido golpeada por el coronavirus a base a cines cerrados y estrenos aplazados, sino también en lo relativo a la celebración de los grandes festivales y entregas de premios. Dentro de EE.UU. ya han sido pospuestos tanto los Oscar como los Globos de Oro del año que viene, mientras se han cancelado varios certámenes de cine. No ha sido el caso, afortunadamente, del Festival de Cine de Venecia.

Si todo va bien, el evento tiene planeado desarrollarse del 2 al 12 de septiembre siendo el primero de estas características que sigue adelante desde que dio inicio la crisis del COVID-19 y, aunque Italia ha sido duramente golpeada por la pandemia, se ha depositado un gran esfuerzo en sus medidas de seguridad. Aún no se ha desvelado la programación, pero sí los nombres de las dos grandes personalidades que recibirán un premio en honor de toda su carrera.

Estas son la actriz escocesa Tilda Swinton y la cineasta hongkonesa Ann Hui, que acudirán al Festival de Venecia para asistir a un homenaje celebrando sus logros. Swinton, ganadora del Oscar a Mejor actriz de reparto por Michael Clayton en 2007 (en breve la veremos en La crónica francesa de Wes Anderson), ha dicho que "venir a Venecia, este año sobre todos los años, para celebrar la inmortalidad del cine y todos los desafíos que tiene que afrontar es un placer para mí".

Puede que Hui necesite algo más presentación que Swinton, y en caso de que no te suene el nombre has de saber que es una prolífica realizadora que en los años 70 y 80 se convirtió en uno de los rostros emblemáticos de la Nueva Ola del cine de Hong Kong, gracias a films como The Secret (1979), Boat People (1982) o Love in a Fallen City (1984). A lo largo de su carrera ha combinado múltiples géneros: desde el thriller a las artes marciales pasando por la autoficción.

En 2014 Hui estrenó The Golden Era en Venecia, precisamente, y en relación a su premio ha dicho con mucho entusiasmo que "estoy tan feliz que no me salen las palabras".