'Spider-Man: Homecoming' - 4 cosas que nos gustan del tráiler… y 2 que no nos gustan tanto

A la tercera adaptación, ¿va la vencida? Esperemos que sí. Por lo pronto, el tráiler de Spider-Man: Homecoming (el regreso del Trepamuros al seno de Marvel) nos ha dejado muy buena impresión. Máxime tras la decepción que, muy a pesar de Andrew Garfield, supuso The Amazing Spider-Man: El poder de Electro. Lo cual no quiere decir, eso sí, que el avance nos haya dejado contentos del todo. Aquí reunimos nuestros puntos a favor, y también nuestros puntos en contra sobre el primer vistazo a un filme que se estrenará el 7 de julio.

Uno de los mayores encantos de 'Spidey' en las viñetas es haberlo visto crecer, prácticamente en directo. Desde el adolescente acomplejado de Stan Lee y Steve Ditko hasta el sufriente fotógrafo del Daily Bugle, y más allá, el Trepamuros ha tenido una de las evoluciones más interesantes del Universo Marvel. Así pues, verle interpretado por un actor de aspecto adolescente (sólo aspecto: Holland tiene 20 años) y que se comporta como tal resulta refrescante tras la ingenuidad de Tobey Maguire y la intensidad de Garfield.

Entendemos que, para una enorme cantidad de espectadores, decir "Marvel" y decir "Tony Stark" es una misma cosa. Y eso, si bien conlleva muchas ventajas, también trae consigo un problema muy gordo: Robert Downey Jr. es un robaescenas de mucho cuidado. En espera de ver cuánto aparece el señor de la armadura en el metraje total de la película, podemos decir que a Marvel se le ve la intención de usar a su rostro más conocido para vendernos el regreso de 'Spidey'. Debido a lo cual nosotros acabamos por preguntarnos quién es el verdadero protagonista de este filme.

¿Cuál es el arma más poderosa de Spider-Man? ¿Su telaraña? ¿Su sentido arácnido? ¿Su agilidad? Nada de eso: si nuestro amigo y vecino tiene un poder infalible, esa es su habilidad para desquiciar a los villanos a base de chistes malos e ideas de bombero. De modo que, cuando le vemos estamparse contra una piscina al grito de "¡Jerónimo!", saludar a la gente mientras se columpia entre los edificios o hacer el ganso con el uniforme puesto, sentimos una honda emoción... y más ganas aún de ver cómo Flash Thompson (Toni Revolori) lo infla a collejas.

Esto no es tanto un reproche hacia la futura película como hacia su presentación. Y, dado que es una lacra que afecta a una gran parte del cine de acción moderno (empezando por los productos Marvel), la señalamos aquí. Porque, ¿cuánto nos revela este tráiler del guión de Spider-Man: Homecoming? Pues está claro que no todo, pero podemos apostar a que sí el primer acto y parte del segundo. Para competir en este mundo de información saturada hay que darle al público cosas de qué hablar, pero seguro que hay formas más elegantes de hacerlo.

Tanto Tom Holland como el director Jon Watts han afirmado que Spider-Man: Homecoming va a mostrarnos el Universo Marvel desde el punto de vista de la gente corriente. Algo que, a juzgar por este avance, el filme está dispuesto a cumplir. Basta con ver momentos como ese vídeo de fitness con el Capitán América (con 'Spidey' fardando con su compañero Jacob Batalon de haberle robado el escudo) para asumir un mundo en el que los superhéroes son celebrities y ver a un señor gigante, vestido de romano, afirmando que se va a zampar la Tierra para desayunar no es algo tan sorprendente.

Un señor calvo, con alas, en mallas verdes. Esa es la descripción del Buitre tal y como aparece en los cómics. Y, pese a ello, es uno de los enemigos más acongojantes de Spider-Man. A fin de conseguir los mismos efectos, Marvel ha vestido a Keaton con un uniforme un tanto más imponente, y la jugada le ha salido bien. No sabemos si será por la interpretación del actor, porque estas cosas impresionan más en la penumbra o porque el miedo a ser partido en dos por una motosierra gigante es universal. El caso es que el villano de Spider-Man: Homecoming es uno de los elementos del tráiler que mejor impresión nos han dejado. A ver si la película le hace justicia… y si, en un futuro, el estudio muestra el mismo tino a la hora de poner rostros al Doctor Octopus, al Duende Verde y (ojalá...) a Kraven el Cazador.