Sofia Boutella: esta momia está que arde

Por algo será la protagonista femenina de la nueva adaptación de 'Fahrenheit 451'. Así es la actriz argelina que se ha convertido en la última sensación de acción de Hollywood.
Sofia Boutella: esta momia está que arde
Sofia Boutella: esta momia está que arde
Sofia Boutella: esta momia está que arde

Bailarina clásica desde los 5 años, integrante del equipo nacional francés de gimnasia rítmica desde los 18 y campeona de bailes de hip hop en su primera juventud. Si el cine de acción son cuerpos en tensión y movimiento delante de la cámara, normal que Sofia Boutella sea la nueva obsesión de Hollywood.

Desde que la actriz argelina despuntó como la afilada Gazelle en Kingsman: Servicio secreto (2014), le han llovido las ofertas de trabajo hasta ascender a papeles de clase A. Los últimos: ser la villana de La momia junto a Tom Cruise e incorporarse a una nueva adaptación de Fahrenheit 451 con Michael B. Jordan Michael Shannon.

Sofia Boutella: esta momia está que arde

Pero Boutella ya demostraba su ritmazo delante de las cámaras desde muchos años antes, sin necesidad de cuchillas en los pies ni vendas cubriéndole el cuerpo. Nacida en 1982 en un distrito de Argel, con madre arquitecta y padre músico de jazz, la futura actriz llegó a París con su familia a los 10 años. Allí probó todas las modalidades posibles de baile y expresión corporal, hasta quedarse con el heterodoxo cóctel de gimnasia rítmica y hip hop que marcó sus primeros pinitos profesionales.

Sofia Boutella: esta momia está que arde

La coreógrafa española Blanca Li, exdirectora del Ballet de la Ópera de París, fue una de sus profesoras. Y el estadounidense Jamie King, su gran valedor. En 2005 se fijó en Boutella para una campaña de publicidad de Nike donde ella y sus contorsiones de break dance lo eran todo.

Unos cuantos videoclips con Madonna (Hung Up, Celebration), Rihanna (SOS) o Usher (Hey Daddy (Daddy's Home)) después, la actriz despuntó en StreetDance 2 (2012), la copia británica de la saga Step Up. De ahí pasó a llamar la atención de los responsables de Kingsman: Servicio secreto y consiguió el papel de Gazelle que impulsó el resto de su carrera cinematográfica.

De ahí saltó inmediatamente a interpretar a Jaylah en Star Trek: Más allá (2016), logrando el que quizás sea el personaje femenino más interesante de la nueva época de la saga estelar. A pesar de que, igual que en La momia, su actuación se ve condicionada por abundantes capas de maquillaje y caracterización, Boutella consiguió transmitir profundidad y fiereza allá donde se requería.

Sofia Boutella: esta momia está que arde

En 2017, Sofia Boutella ha tenido su año. No sólo se lo hace pasar mal a Tom Cruise compartiendo protagonismo en La momia como el personaje que da título a la película. También aparece junto a Charlize Theron en Atómica, la esperada nueva película de acción de David Leitch, uno de los responsables de John Wick y futuro director de Deadpool 2. Allí, la actriz interpreta a una espía francesa instalada en Berlín durante los últimos días antes de la caída del Muro.

Theron tendrá que descubrir si Boutella es amiga o enemiga, pero lo que ya ha hecho saltar los termómetros de internet ha sido su comentada escena de sexo juntas.

Sofia Boutella: esta momia está que arde

En conclusión, Sofia Boutella todavía no ha empezado a rodar Fahrenheit 451 pero ya tiene a medio planeta en llamas.

Sofia Boutella: esta momia está que arde
Mostrar comentarios

Códigos Descuento