A partir de un conocimiento puramente superficial de la cuestión (reducido, quizá, a las películas en las que ha intervenido), es fácil concluir que la vida de Sharon Stone ha sido apasionante hasta ahora. Sin embargo, y más allá del ámbito laboral, esta actriz tiene muchísimas sorpresas guardadas bajo la manga, a desarrollar en su inminente libro de memorias, La belleza de vivir dos veces.
Dicha autobiografía se publicará en EE.UU. a finales de año, pero Stone ya está inmersa en la promoción y durante una entrevista con Brett Goldstein en Films to be buried ha compartido una de sus experiencias más impactante. Y es que hace tiempo, mientras la actriz planchaba en su casa, fue alcanzada por un rayo que le mandó volando contra la nevera y le hizo caer inconsciente.
"Estaba llenando la plancha con agua", explicaba. "Tenía una mano en el grifo y otra en la plancha cuando el fregadero fue impactado por un rayo. Me alcanzó y me lanzó por la cocina hasta golpear el refrigerador". Fue una "intensa experiencia" que podría haber tenido consecuencias graves, pero por suerte su madre Dorothy andaba por ahí cerca y pudo reanimarla para posteriormente llevarla al hospital de Beverly Hills.
"Mi madre estaba parada ahí y me golpeó en la cara, y me trajo de vuelta a la vida. Estaba en un estado tan alterado que no sé cómo describirlo. Lo veía todo brillante, increíble...", prosigue Stone. Sin duda, en su libro encontraremos anécdotas muy jugosas más allá de su vinculación a éxitos como Desafío total o Instinto básico, quizá profundizando también en otros episodios muy conocidos de su vida y más traumáticos, como cuando sufrió un derrame cerebral en 2001.
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