¿Por qué los pósters de X-Men son siempre tan feos?

Los carteles de las películas SÍ son importantes. Y lo son más todavía en el caso de las sagas. Los fans que empapelan sus casas con los pósters de sus películas favoritas necesitan buen material. Todo lo contrario de lo que llevan ofreciendo las últimas películas de los X-Men desde el relanzamiento de la saga con X-Men: Primera generación. Desde que Fox llamó a Matthew Vaughn para que construyera una nueva mitología mutante con lo mejor de las primeras películas de Brian Singer los pósters han ido de mal en peor, ni si quiera la vuelta del propio Singer para X-Men: Días del futuro pasado y la próxima X-Men: Apocalipsis han paliado este despropósito.

En los últimos días X-Men: Apocalipsis ha acelerado su carrera promocional hacia el estreno con un nuevo y espectacular tráiler de la cinta y con una colección de portadas en EMPIRE que como no podía ser de otro modo han vuelto a provocar una violenta hemorragia en nuestros vasos oculares. ¿Nadie del estudio es consciente de esta falta de gusto? ¿En serio?

Pero ya basta de echar veneno gratuitamente, pongamos las cartas sobre la mesa:

PRIMER CRIMEN

Los protagonitas están repartidos por el póster como auténticos pegotes utilizando distintos tamaños para cada uno con la intención de dar una sensación de profundidad que se cae por su propio peso. Si os fijáis en el reflejo de los personajes en el suelo os daréis cuenta que los diseñadores saben photoshop sí, pero nivel usuario.

SEGUNDO CRIMEN

¿En serio? Vale, la idea de las siluetas puede funcionar, quizá un poco simplona pero efectiva en cualquier caso. ¿Pero de quién fue la idea de colocar las caras de los personajes ahí en medio con un desenfoque gaussiano de estar por casa?

TERCER CRIMEN

A ver, vamos por partes. Entendemos que por su caché Jennifer Lawrence y Hugh Jackman deben ser las figuras más relevantes del póster pero podrían haberse ahorrado lo de colocar a todos los demás personajes de forma superpuesta unos con otros en posturas totalmente aleatorias que no tiene consonancia ninguna.

Y luego está el tema del color del cielo, entendemos que es aposta y que su intención es dividir el bien del mal, pero no solo queda feo también es un subrayado innecesario.

CUARTO CRIMEN

¿Os acordáis de lo de que el cielo era para distinguir el bien y el mal? Pues en este póster con las dos edades de Magneto, villano por antonomasia, el cielo también cambia de color. O se les ha escapado o se han liado un poco con el personaje.

¿Y lo de poner en letras enormes Hugh Jackman cuando ni siquiera aparece en la imagen?

QUINTO CRIMEN

Todos los fondos de esta colección de portadas de EMPIRE con los personajes puestos en primer plano son bastante ridículos. Pero en concreto vamos a fijarnos en el de Mystica, una Jennifer Lawrence caracterizada como la carismática mutante, camina mientras al fondo de la imagen la gente se agolpa frente a unas vallas, los tamaños son tan desproporcionados que Lawrence parece un gigante paseando por la ciudad.