Para Christopher Nolan, estrenar 'Tenet' en verano no es cuestión de dinero

¿Ha dado Hollywood por perdido el verano cinematográfico? Esto se pregunta The Hollywood Reporter en un reportaje recientemente publicado, examinando escenarios donde puedan retomarse los grandes estrenos y profundizando en las intenciones de Christopher Nolan con respecto a Tenet. Este film le ha costado 200 millones de dólares a Warner (cifra sorprendente tratándose de una historia 100% original), aunque el apellido de su director es lo suficientemente respetado como para arriesgarse.

¿Hasta qué punto, sin embargo? Según cuenta este medio, Nolan se reunió con los ejecutivos del estudio a principios de junio para discutir las posibilidades de distribución. El cineasta se ha mantenido firme durante las últimas semanas en la intención de que Tenet sea el gran estreno que guíe a los cines a una normalidad más o menos completa, pero se ha topado una y otra vez con los reparos de sus socios.

Esta firmeza se debe no tanto a un exceso de confianza o ambición por su parte como, al parecer, a una férrea voluntad de solidarizarse con las salas de cine, que a causa de la crisis del coronavirus y la obligación de permanecer cerrados encaran pérdidas millonarias. Y no solo en EE.UU., ya que alrededor del mundo la falta de grandes estrenos procedentes de Hollywood se está notando, y resulta dudoso que recurrir a reestrenos sea sostenible a largo plazo.

Nolan es lo suficientemente conocido por el público como para atraerlo de vuelta a las salas, pero la posibilidad de nuevos rebrotes de COVID-19 no es el único reparo que encuentra Warner en sus aspiraciones. Tal y como supimos hace tiempo, la major necesita que el 80% de los cines alrededor del mundo estén abiertos para que Tenet dé beneficios (se estiman unas cifras de 400 millones de dólares para ello), por no hablar de las restricciones de aforo en cada sala para respetar la distancia de seguridad.

Todo lo cual ha deparado en que, pese a que Tenet siga presente en el calendario veraniego, haya experimentado ya hasta dos retrasos. Programada inicialmente para el 17 de julio, Warner pospuso el estreno al 31 del mismo mes. Posteriormente se dispararon nuevos casos de COVID-19 en los estados de California, Texas y Florida, de forma que el estudio volvió a cambiarlo al 14 de agosto. Esta es la fecha definitiva, pero la posibilidad de que vuelva a modificarse es bastante sólida.

De hecho, solo un gigante como Disney se ha permitido conservar un estreno cercano para uno de sus nuevos blockbusters, estando Mulan programada para el 21 de agosto mientras la Casa del Ratón ya ha mandado varias producciones directamente a Disney+ y no está nada claro cuándo verán la luz películas como Viuda Negra. Los cambios de Tenet, asimismo, han provocado un efecto dominó en el calendario de Warner, mandando Wonder Woman 1984 a octubre.

Otros estudios, al contrario que Disney y Warner, han sido más precavidos y bien han dado un gran margen de tiempo a sus próximos proyectos (como Universal con Sin tiempo para morir, fijada para noviembre) o directamente los han pasado al año que viene, como ayer mismo pasaba con Monster Hunter. La angustia ante lo imprevisible de un mundo asolado por el coronavirus guía estas decisiones, y Nolan parece ser el único en querer arriesgarse a las pérdidas económicas que podría suponer dar un paso al frente.