Oscar 2020: ¿Qué diantres tiene que hacer una mujer para que la nominen a mejor dirección?

Un año más, ha llegado el día en el que la prensa cinematográfica, desde esas trincheras propias conocidas también como 'redacción' y con los cascos bien pegados a las orejas, escuchamos desde todas partes del mundo la lista de nominadas a los Oscar. En CINEMANÍA, aún con los bocatas en la garganta, estamos en proceso de asimilación de las elegidas para competir el próximo 9 de febrero en la ceremonia de entrega de la 92ª edición de los premios de la Academia de Hollywood.

Y, como no puede ser de otra manera en estos casos, es inevitable echar de menos más de un nombre/título entre los nominados (aquí nuestra lista de los grandes olvidados). Este año, para variar, lo verdaderamente alarmante vuelve a ser la falta de mujeres nominadas a mejor dirección.

Categoría en la que compiten Martin Scorsese por El irlandés, Todd Phillips por Joker, Sam Mendes por 1917, Quentin Tarantino por Érase una vez en Hollywood y Bong Joon-ho por Parásitos. Pero en la que faltan muchas y cuya ausencia duele aún más en un año en el que el cine dirigido por mujeres ha dejado algunos de los mejores filmes (y de los géneros más diversos, para más inri).

A nosotros se nos ocurren cinco candidatas tan o más merecedoras de estar en la lista que los ya presentes en ella:

¿Dónde están Olivia Wilde y sus empollonas?

Muchos han dicho de Súper empollonas que es una especie de Supersalidos en clave femenina. Y, efectivamente, si en algo coincide esta película con la de Greg Mottola es en su frescura e irreverencia a la hora de retratar la amistad, el despertar sexual o el temor a un futuro incierto. Pero Súper empollonas es mucho más que Supersalidos con mujeres.

Esta comedia juega a las Barbies con sus protagonistas, las presenta con bailes imposibles, nos transporta en el coche de un director de instituto convertido en conductor de uber a través de planos secuencia desde una piscina hasta una habitación de fiesta. Super empollonas es la hilaridad genuina que provoca Beanie Feldstein y la fragilidad superada de Kaitlyn Dever. También la ironía y sinceridad en el guion de cuatro mujeres: Emily Halpern, Sarah Haskins, Katie Silberman y Susanna Fogel. Pero Súper empollonas es sobre todo el buen hacer tras las cámaras de una Olivia Wilde que ha debutado en la dirección con esta mirada única y original al fin de la adolescencia.

¿Dónde están Greta Gerwig y sus mujercitas?

Comprobado: lo de Greta Gerwig con Lady Bird, ópera prima y oda al amor entre una madre y una hija, nada tuvo que ver con "la suerte del principiante". Para prueba, su nueva adaptación de Mujercitas. ¿Quién podía pensar que aún quedaba algo nuevo por contar de la novela de Louisa May Alcott? ¿Que se convertiría en una reivindicación feminista con esa Saoirse Ronan en la piel de la Jo March más autoconsciente? ¿O que Florence Pugh haría no solo que odiásemos un poco menos a Amy March, sino que empatizásemos con esa superviviente de otra época?

Mujercitas está nominada a los Oscar en las categorías de mejor película, mejor actriz (Ronan), mejor actriz de reparto (Pugh) y mejor guion adaptado (Gergiw), así como en las de mejor música original y mejor diseño de vestuario. Sin embargo, el nombre de Greta no figura entre los de Scorsese, Tarantino y compañía. Alguno casi pensaría que los presentadores se han despistado al anunciar a los nominados a mejor director. Ojalá fuera eso...

¿Dónde están Lulu Wang y sus despedidas?

El de The Farewell es un caso parecido al de Súper empollonas: aclamada película que no se ha llevado ni una mísera nominación a los premios de la Academia 2020. Ni para Awkwafina, su protagonista y ganadora del Globo de Oro a mejor actriz de comedia o musical, ni para la directora Lulu Wang. 

La sensibilidad narrativa de la cineasta a la hora de abordar lo ocurrido cuando a su abuela le detectaron un cáncer terminal, así como su aproximación naturalista a este retrato de familia a medio camino entre EE UU y China, no ha sido suficiente para que los Académicos hayan decidido ponerla en la lista de nominados.

¿Dónde están Lorene Scafaria y sus estafadoras?

Es un hecho: Jennifer Lopez había construido la mayor parte de su carrera cinematográfica sobre comedias románticas, algunas mejores que otras, y, por consiguiente, pocos la imaginaban pisando las alfombras rojas de la temporada de premios como nominada. Lo mismo podríamos decir de Lorene Scafaria, una directora cuyo currículum en gran pantalla cuenta con títulos como Buscando un amigo para el fin del mundo o Una madre imperfecta. 

Sin embargo, entre ambas han creado la que muchos apodan la El lobo de Wall Street femenina. Solo que en Estafadoras de Wall Street, en lugar de a Leonardo DiCaprio vendiéndote un boli, tenemos a unas strippers supervivientes en busca de una vida mejor en una Nueva York ahogada por la crisis financiera. Es trepidante, extrema, scorsesiana, sí, pero pasada por una apabullantemente enternecedora camaradería femenina. Y ni por esas han superado los prejuicios de los académicos.

¿Dónde están Céline Sciamma y sus retratos?

Puede que Retrato de una mujer en llamas ni siquiera sea la candidata francesa para optar a mejor película internacional en los Oscar, pero no por eso es menos reivindicable que Parásitos, Dolor y gloria o Los miserables.

Sciamma, siempre con el ojo puesto en las minorías, ha conseguido reflejar aquí una historia de amor entre dos mujeres que ha conquistado al público sin distinción de género, sexo o nacionalidad. Una pincelada precisa que, pese a su belleza y perfección narrativa, también ha pasado inadvertida en la temporada de premios. Académicos, recordad el alegato de Bong Joon-ho a favor del cine subtitulado en los Globos de oro para que esto no vuelva a pasar.