Muere Carlo Rambaldi, el hombre que animó los sueños de Scott y Spielberg

Lector, si eres un fan de los efectos especiales, tienes un motivo para estar triste: Carlo Rambaldi, el artista italiano que puso en movimiento al xenomorfo de Alien, a los gusanos de arena de Dune y al mismísimo E. T., ha fallecido hoy en la ciudad calabresa de Lamezia Terme a la edad de 86 años. Retirado del cine desde 1988, Rambaldi dejó este mundo con tres Oscar en su repisa: un premio especial obtenido por el remake de King Kong (1977) y otros dos debidos a sus trabajos con Ridley Scott y Steven Spielberg.

Curtido en el estajanovista cine italiano de los 50, donde se codeó con Mario Bava (en Terror en el espacio, considerada una antecesora de Alien), Dario Argento, Lucio Fulci Pasolini y Marco Ferreri, Rambaldi fue uno de los grandes innovadores de los trucajes en celuloide. Gracias a su labor y a la de otros pioneros como Stan Winston, las criaturas insólitas dejaron de aparecer en la pantalla como engendros cutres de cartón piedra, aprovechando en cambio las ventajas ofrecidas por el látex y la robótica. Véase, además de las creaciones ya citadas, al extraterrestre que concibió para Encuentros en la Tercera Fase, su primera colaboración con Spielberg.