El nivel de Leonardo DiCaprio en sus últimos trabajos es altísimo, se expone en cada papel, sufre en cada rodaje y a veces se echa la producción de la película encima. Qué sí, que quiere el Oscar pero por el motivo que sea DiCaprio está haciendo de si mismo una auténtica leyenda de Hollywood. En El renacido interpreta al Hugh Glass un explorador de comienzos del siglo XIX que sobrevive a un oso y se enfrenta a un territorio hostil para buscar venganza. ¿Y nos extraña verlo en este papel? No, hay algo en DiCaprio que siempre nos hace verlo cómodo y adecuado en las más diversas ambientaciones temporales, lo que unido a su gusto por participar en películas de época permite recorrer gran parte de la historia reciente de EE UU (los dos últimos siglos, al menos) a base de sus interpretaciones. Si no nos crees, será mejor que empecemos el recorrido:
Mediados del siglo XIX
Gangs of New York (2002) daba comienzo a su vibrante relato fundacional de Nueva York con una multitudinaria pelea en Five Points en 1846, aunque la mayor parte de la película y el enfrentamiento entre Amsterdam Vallon (DiCaprio) y Bill el Carnicero (Daniel Day-Lewis) tenía lugar en 1862.
También fue un terrateniente texano llamado Calvin Candie en Django Desencadenado (2012). Quentin Tarantino le colocó en la desagradable situación de explicar al esclavo libre Jamie Foxx cómo funcionaba el mundo dos años antes de la Guerra de Secesión.
Finales del siglo XIX
Lejos de la cosmopolita Nueva York, Rápida y mortal (1995) era un western en toda regla y, como tal, transcurría en el Lejano Oeste (Arizona, para ser exactos). Allí donde el destino manifiesto olía a pólvora.
1912
Empezar el siglo XX a bordo del Titanic no es muy buen presagio... salvo si se trata de Titanic (1997), la película multimillonaria. Mientras el porvenir de Jack Dawson quedó congelado, el de DiCaprio subió al estrellato desde entonces.
1920s
Baz Luhrmann le escogió para interpretar al misterioso playboy adicto a las fiestas y con oscuro pasado del que escribió F. Scott Fitzgerald. Leonardo representa un arquetipo de millonario propio de Long Island en los años 20 en El Gran Gatsby.
1930s
Nos saltamos los locos años 20 para dejar sitio a Jay Gatsby y llegamos a El aviador (2004), con el gran tycoon Howard Hughes dirigiendo Los ángeles del infierno y alcanzando nuevo récords de velocidad en vuelo con riesgo para su propia vida. Eso sí, las manos siempre bien limpias.
1950s
Revolutionary Road (2008), igual que Shutter Island (2010) mira con amargura a la primera mitad de un siglo lleno de atrocidades y sueños rotos. Como el del matrimonio Wheeler, que vinculan toda su felicidad a una nueva vida en París para terminar atrapados en los EE UU de urbanización suburbana, interiores color pastel y violencia doméstica.
1960s
El estafador Frank Abgnale Jr. consiguió una fortuna haciéndose pasar por piloto de Pan Am durante los 60, tal y como vimos en Atrápame si puedes (2002). Seguro que había una forma más sencilla de ganar el dinero, pero teniendo en cuenta lo bien que le permitía pasárselo con las azafatas de las aerolínea entendemos perfectamente la decisión.
1970s
Al final de su vida, J. Edgar Hoover había logrado el objetivo de convertirse en el hombre más poderoso de EE UU gracias a su dirección del FBI. J. Edgar (2011) nos demostró que, en realidad, eso no fue suficiente para él.
1980s
Jordan Belfort era un tipo honrado que perseguía el sueño americano, pero pronto empezó a aprender que en Wall Street lo importante no eran los clientes sino engordar sus comisiones y agrandar su propia ambición. Su éxito le valió el mote de El lobo de Wall Street.
1990s
Aunque la autobiografía del poeta Jim Carroll se desarrolla en la década de los 50, para la adaptación Diario de un rebelde (1995) la acción se trasladó a principios de los 90 en Nueva York, captando el paisaje urbano de la ciudad contemporáneo a la filmación. Desde luego, Long Island había cambiado mucho desde los años 20.
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