Lars Von Trier: "No sé si podré dirigir sobrio"

Ahora que ha abandonado las drogas y el alcohol, el director de 'Nymphomaniac' se plantea abandonar el cine. ¿Qué pasará con su película de acción?
Lars Von Trier: "No sé si podré dirigir sobrio"
Lars Von Trier: "No sé si podré dirigir sobrio"
Lars Von Trier: "No sé si podré dirigir sobrio"

Una botella de vodka diaria: esa era la cantidad de alcohol que el director danés Lars Von Trier ingería habitualmente antes de tomar la decisión de incorporarse a Alcohólicos Anónimos. En una entrevista con el diario danés Politiken, recogida por The Guardian, el autor de Dogville, Melancolía Nymphomaniac reconoció hallarse actualmente en tratamiento para superar una adicción a las drogas y el alcohol, herramientas que, explica, usaba para entrar en "un mundo paralelo" y estimular su creatividad. Durante la charla, su primera entrevista importante desde aquellas declaraciones sobre Hitler que le costaron un veto a perpetuidad en el Festival de Cannes, el cineasta afirmó haber dirigido casi todos sus filmes en plena intoxicación. Y ahora, tras superar la dependencia, afirma sentir dudas sobre si podrá volver a ponerse tras la cámara: en estado de sobriedad, precisó, sólo se siente capaz de crear "películas de mierda".

"No sé si podré volver a dirigir, y eso me preocupa", prosiguió Von Trier (58 años). "Los ex borrachos o ex drogadictos nunca crean obras artísticas de valor: ¿a quién coño le importan los Rolling Stones sin bebida, o Jimi Hendrix sin heroína?". Profundizando sobre esto, el director afirmó haber escrito el guión de Dogville en 12 días, durante los cuales no paró de drogarse. Concebir Nymphomaniac, película que escribió tras abandonar los tóxicos, le habría costado un año y medio.

Conocido por sus declaraciones extemporáneas y su afición por dar la campanada, Von Trier sufre además de depresión clínica, así como de un gran número de fobias: "Me da miedo todo en esta vida, salvo dirigir cine", declaró en 2007. Así, estas intenciones de retirarse pueden ser cuestionadas, aunque también dejan en entredicho la continuidad de proyectos como Detroit, su incursión en el cine de terror, de esa película de acción de la que también ha hablado y de The House That Jack Built, su regreso a las series de televisión. Por lo pronto, el cineasta danés admite seguir acudiendo diariamente a reuniones de Alcohólicos Anónimos.

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