Lady Gaga se hace un tatuaje del peor momento de 'Ha nacido una estrella'

Nos encanta Ha nacido una estrella y somos esos motivados que piden Shallow en los karaokes como si fuera una canción mínimamente fácil de interpretar bajo el influjo del alcohol que se suele llevar en el caudal sanguíneo cuando se llega al punto de pedir Shallow en un karaoke. Así que no pienses que vamos a criticar que Lady Gaga haya decidido hacerse un tatuaje en conmemoración de su trabajo en la película de Bradley Cooper, actuación por la que ganó un Globo de Oro y está nominada al Oscar. Ella es el alma de la película y su interpretación de Ally, legendaria; superior a las anteriores versiones de la misma historia.

¡Quién no querría inmortalizar en su propia piel tal logro! Sin embargo, no nos parece que el momento elegido sea precisamente el más agraciado de Ha nacido una estrella (aunque dé para un tatuaje chulo). "Mi espina dorsal ahora es una rosa", ha escrito la cantante y actriz al compartir con sus seguidores de Instagram una foto del tatuaje que se ha hecho en la espalda: una enorme rosa que le recorre la columna vertebral en homenaje a La vie en rose. 

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Se trata, por supuesto, de la canción de Édith Piaf que canta Ally en el bar donde conoce al personaje de Bradley Cooper en el filme. Estamos de acuerdo en que el flechazo y conexión entre los dos protagonistas durante los primeros minutos de la película, plasmado en un continuo temporal de puro virtuosismo en el lenguaje cinematográfico, es el motor que empuja Ha nacido una estrella hasta el final, pero sin duda la extraña interpretación que hace Ally/Gaga del clásico francés, con una pronunciación un tanto marciana de la letra, no es precisamente el momento más álgido de la película. Más bien lo contrario: está bastante, bastante lejos del shallow.