'Jane Got a Gun', la película que nadie quiere hacer

Lo tenía todo para ser uno de los títulos más esperados del año que viene, pero ahora este 'western' protagonizado por Natalie Portman es la pareja de baile que nadie quiere. Por CINEMANÍA
'Jane Got a Gun', la película que nadie quiere hacer
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'Jane Got a Gun', la película que nadie quiere hacer

Que la escocesa Lynne Ramsay es una cineasta con las ideas muy claras y una meticulosidad particular está fuera de toda duda. Entre su segundo largometraje, Morvern Callar (2002) y la reciente Tenemos que hablar de Kevin (2011) pasaron nueve años (disputa con Peter Jackson por los derechos de The Lovely Bones incluida) y, justo cuando parecía que la directora tenía entre manos su proyecto más mediático hasta la fecha, ella decide hacer una bomba de humo y desaparecer el primer día de rodaje.

Recapitulemos: el western Jane Got a Gun, escrito por el debutante Brian Duffield (y procedente de la Black List de 2011 de mejores guiones en busca de director) se anunció en marzo del año pasado como la colaboración entre Ramsay y Natalie Portman, quien interpretaría a la protagonista que da título al filme. El asunto fue aumentando de interés cuando Michael Fassbender, Joel Edgerton y Rodrigo Santoro se fueron incorporando progresivamente al reparto de lo que prometía ser un western de venganza seco y furioso. Pero todo empezó a tambalearse cuando Fassbender decidió abandonar el proyecto hace una semana alegando problemas de agenda con X-Men: Days of Future Past. Un rápido movimiento de producción después, Jude Law llegó para ponerse en su lugar y todo parecía listo para que el rodaje empezara esta misma semana, según el calendario previsto.

Sin embargo, resulta que, sin dar ningún aviso previo, la directora Lynne Ramsay decidió no presentarse en el set el primer día de rodaje. Tan simple como eso. A partir de ahí, los acontecimientos se han acelerado, con el productor Scott Steindorff encolerizado por el comportamiento de la cineasta y dispuesto a encontrarle sustituto cuando antes para poder mantener el proyecto en pie. Casi inmediatamente, Gavin O'Connor, el autor de Warrior, fue contratado como el nuevo director de la película para iniciar el rodaje como si no hubiera pasado nada. Pero no podía ser tan fácil. Lo último que sabemos es que Jude Law también se marcha, según publica Deadline, declarando que él "había firmado para trabajar con Ramsay". No te lo tomes como algo personal, Gavin. Todo esto imaginamos que vuelve a dejar la película en punto muerto, faltando actor para uno de los papeles masculinos principales.

A todo esto, Ramsay sigue sin haber hecho ninguna declaración pública. En un nuevo giro de la situación, Huffington Post se puso en contacto con la agente de la cineasta para descubrir que era Jessica Steindorff (sí, hija del productor de Jane Got a Gun), quien ha decidido dejar de trabajar para su representada a consecuencia de todo el asunto. ¿Qué más sorpresas nos deparará esta historia?

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