Ian McKellen sale en defensa del CGI de 'Cats' del modo más desconcertante posible

¿Recordáis cuando se estrenó el primer tráiler de Cats? Aquel día, paralelamente a nuestras retinas, Internet estalló. Llenándose de memes y de montajes de este mismo tráiler con música terrorífica, todo hacía presagiar que la película de Tom Hooper se convertiría en la sensación viral de las Navidades de 2019, y parte de su reparto está muy comprometida con que esto acabe ocurriendo. Incluso cuando tratan de ponerse serios y explicar cuál es la razón detrás de... bueno, detrás de todo.

El centro del estupor y las burlas era el aspecto de los personajes de dicho film, siendo todos actores famosos introducidos en una especie de traje digital de gato antropomórfico. Una decisión que, si bien establecía continuidad con lo visto en las tablas de Broadway, le otorgaba a la película un aire pesadillesco bastante importante. Pero Ian McKellen, miembro del reparto, está 100% a favor de lo que han hecho, y ha querido explicarlo durante el programa Entertainment Tonight. Había venido a hablar de The Good Liar, su última película. Pero claro.

"El espectáculo de Cats no iba de personas siendo convincentes como gatos, sino de personas de verdad que descubrían su naturaleza felina. Y funcionó", dijo de forma solemne, y acto seguido pasó a defender la tecnología CGI de la que Hooper. "Cuando la película se estaba planeando, supongo que existió la tentación de convertir actores en gatos, como El rey león, y hacer que parecieran gatos realistas, pero es que no son gatos reales".

"Es gente que interpreta a gatos, eso es lo que defiende la película", prosiguió el veterano intérprete. "Y ha sido algo muy sabio, sobre todo en lo que respecta a los bailarines. Si quieres ver a alguien que descubre el gato que hay dentro de él, vas a quedar boquiabierto. Judi Dench, James Corden, Taylor Swift, el resto del reparto y yo hemos trabajado muy duro en entregar nuestra versión felina".

Básicamente, según McKellen, los protagonistas de Cats son humanos que descubren su "felinidad", o algo así. No sabemos muy bien a qué se refiere ni si Andrew Lloyd Webber está de acuerdo, pero no tardaremos en salir de dudas cuando la película se estrene en España este 25 de diciembre.