Galería: Monstruos de cine en versión IKEA

Con la posible excepción de la Criatura de Frankenstein, tan recosida ella, la génesis de los monstruos de cine siempre ha sido una cosa muy arcana y poco controlable: antiguas maldiciones, tecnología punta, raros trastornos mentales o adolescentes practicando sexo prematrimonial son algunos de los ingredientes necesarios para crear un engendro asesino en condiciones. "¿Cómo facilitarles las cosas a los amantes del terror y el gore?", se preguntó el ilustrador Ed Harrington, y ante él apareció una respuesta de lo más sencilla. Porque, a estas alturas, incluso el científico loco más insociable ha montado alguna vez un mueble de IKEA, y está familiarizado con esos esquemas mediante los cuales la compañía sueca nos enseña a armar sus amarios, mesas, lámparas y demás. Animado por tan aguda inspiración, Harrington explica en estas imágenes como dar vida (o no-vida) a criaturas de todo pelaje: desde el entrañable Eduardo Manostijeras (la única presencia benévola del lote) al Jeff Goldblum híbrido e insectoide de La mosca, pasando por Jason Voorhees (Viernes 13), el engendro fecal de The Human Centipede (¡uf!) y, horror de horrores, Pinhead, el líder de la secta sadomaso de los Cenobitas (Hellraiser). En algunos casos, las herramientas necesarias para poner en marcha a estos seres siguen siendo algo difíciles de encontrar (¿alguien sabe dónde comprar una Configuración de Lamentos hoy en día?) pero todos sabemos que, con paciencia y una llave Allen, cualquier cosa es posible...