Entrevista a Álex González, el mutante español

Sólo un puñado de 'pelis' ('Segundo asalto'), algunas series (‘UPA’, ‘Cuenta atrás’) y el actor madrileño ya se codea con Kevin Bacon y January Jones en ‘X-Men: Primera generación’. Por IRENE CRESPO
Entrevista a Álex González, el mutante español
Entrevista a Álex González, el mutante español
Entrevista a Álex González, el mutante español

En el número de este mes de CINEMANÍA encontrarás nuestra entrevista con Álex González, el actor madrileño al que Matthew Vaughn llamó para dar vida a Riptide, uno de los nuevos mutantes de la esperada X-Men: Primera generación, que se estrena hoy en toda España. Dadas las limitaciones del papel, sólo te ofrecimos parte de nuestra charla, pero ahora puedes leerla íntegra y descubrir si, antes de hacer la película, Álex leía cómics de los X-Men, cómo consiguió entrar en una de las grandes superproducciones del año, el curioso superpoder de su personaje o su relación con compañeros de reparto tan distinguidos como Kevin Bacon.

¿Cómo conseguiste el papel de Riptide?

Surgió un poco de forma milagrosa. Yo estaba estudiando inglés en un Peyton, un pueblo en Inglaterra, en agosto. Me llamó mi representante diciéndome que había un cásting de X-Men en Londres al día siguiente. No hablaba casi nada de inglés, pero bueno lo hice como pude. Volví a Madrid y me llamaron para entrevistarme con Matthew Vaughn.

¿Y quién es Riptide?

En español era Marea, pertenece a los Merodeadores, trabaja con Sebastian Shaw [Kevin Bacon], que lucha por lo que él cree es la verdadera raza aria, una raza de mutantes, superpoderosos.

¿Cuál es tu superpoder?

Controlar el viento. Es muy gracioso porque controlar el viento en inglés (“he can control the wind”) significa que se tira pedos. Me lo dijo un periodista en mi primera entrevista en inglés [risas].

¿No llevas traje de látex?

Curiosamente, los villanos no llevamos. Era de lo que más ilusión me hacía porque era como prolongar el juego de la infancia y llego a las pruebas de vestuario me ponen un traje de chaqueta fantástico hecho a medida, el mismo en gris, luego en violeta... Y yo: “¿Y mi traje de superhéroe?”. “No, no, tu traje de superhéroe es el violeta”. Fue una desilusión.

¿Cómo fue la entrevista con Matthew Vaughn?

El pobre intentó hablar conmigo de fútbol español y vinos... Me explicó quién era mi personaje, porque hasta ese momento no sabía nada de la historia –el cásting fue con nombre y texto inventados– y me enseñó la demo de cómo daría vueltas mi personaje para su poder, en una mesa giratoria.

¿Entraste in extremis?

Sí, me cogieron sólo dos meses antes del rodaje.

¿Cómo fue el rodaje con todas esas estrellas?

Para mí esta película confirma una teoría: los grandes no llegan arriba sólo por ser buenos actores, sino también por ser buena gente.

Ya no estás más que a un grado de separación de Kevin Bacon...

[Risas] ¡Es verdad! Kevin es un tipo maravilloso y además me lo ha puesto muy fácil. Al final de la peli se lo agradecí, y me dijo: “¡Qué dices! Si yo también estaba nervioso, esta película es muy grande hasta para mí”.

¿Tuviste algún coach para el inglés?

No, septiembre, octubre y noviembre fueron meses muy estresantes. Me acuerdo por ejemplo que Jason Fleming hizo una comida en su casa y fuimos todos. Recuerdo estar allí seis horas sentado como un mueble. Al final del rodaje Jason, me dijo: “¿Cómo lo has hecho? ¿Cómo nos has engañado seis meses si no hablas nada de inglés?” [risas].

¿Conocías el cómic y todo el mundo X-Men antes de entrar en la película?

No soy muy seguidor de cómics en general, pero sí de cine. Había visto todas las películas de X-Men.

¿Qué te parecen las anteriores películas?

Lo bueno que tiene X-Men en comparación con otras películas de cómic es que te lo crees, podría ser verdad que de repente un tío sacara unas garras.

¿Qué es lo mejor de ésta con respecto a las anteriores?

Sin contar Lobezno, las otras tres en mi opinión son un poco monocromáticas, se mojan un poco en temas políticos, pero al final son pelis de acción. La diferencia es que en ésta hay como varios niveles para varios tipos de audiencias: por un lado, es la superproducción del verano, mucha acción, efectos especiales; por otra parte, cuenta casi una historia de amor entre dos hombres, no romántica, cómo y por qué pasan del amor al odio. Y, por último, me encanta que, siendo una superproducción americana, le metan tanta caña al mensaje de la película: “Sé tú mismo, no reniegues de lo que eres”.

¿Qué mutante te habría gustado ser?

Hay muchos personajes que me atraen mucho. Magneto, como actor, me atrae mucho por cómo combina la fragilidad con la agresividad que tiene. Y luego puede mover el metal... que para aparcar vendría muy bien [risas]. Y Lobezno también, sobre todo, supongo por el personaje que nos ha mostrado Hugh Jackman, que también combina la agresividad con su dolor.

¿Te gusta el cine de superhéroes?

Me gusta todo tipo de cine, desde cine de autor a una superproducción como X-Men, incluso como actor creo que es bueno mezclarlos. Siguiendo ejemplos como Ian McKellen que pasa de Hamlet en un teatro pequeño a hacer X-Men, creo que ese es el perfecto balance en la carrera de un actor.

¿Tu película de cómic favorita?

Me quedo con dos: con el mundo de Batman creado por Christopher Nolan y con el mundo de X-Men creado por Bryan Singer.

¿Y tu superheroína favorita?

Mi abuela… y si no Catwoman.

¿Cuál sería tu superpoder si pudieras elegir?

Esto del viento... [risas] tampoco ayuda mucho. Ser invisible o teletransportarme.

¿Estuviste a punto de ser El Capitán Trueno?

Estuve ocho meses trabajando en el papel en un proyecto que iba a dirigir Daniel Calparsoro, él lo dejó y cambió todo. En ese momento me pareció una gran injusticia, no lo entendía mucho, había dedicado mi tiempo, mi dinero... La peli iba a ser en inglés, iba cuatro horas a clases todos los días, ir al gimnasio, me dejé el pelo largo... Acto seguido me salió una peli en la que tenía que llevar el pelo largo, y al acabarla me salió el cásting de X-Men para la que me sirvió el pelo largo, lo justito que había aprendido de inglés, y el entrenamiento. Moraleja: si pones toda tu alma en algo, al final la vida te lo da.

¿Y qué entrenamiento has hecho?

En el rodaje había un preparador físico y todos entrenábamos todos los días con él. Yo, además, me apunté a clases de danza clásica, lo cual fue muy gracioso sobre todo para el resto, porque consideré que el personaje tenía algo muy elegante cuando se movía y que lo aprendería con el ballet, me ayudó un poco.

¿Te mudas a Los Ángeles?

No, de momento, no. Hasta ahora no había ni coqueteado con la idea de trabajar fuera, porque me queda tanto por hacer en España y al acabar el rodaje de X-Men en Los Ángeles surgieron cosas, agentes de allí... y entonces empecé a pensar en abrir el repertorio. Pero, de momento, no, me queda todo por hacer aquí. Si estuviera en la situación de Banderas, Bardem o Penélope Cruz, que se fueron habiendo trabajado con tantos directores aquí...

¿Cuáles son tus motivos personales para ser actor?

Siempre había pensado en ser actor y nunca le había puesto nombre. Cuando decidí ser actor de verdad fue al ver Antes que anochezca y el trabajo de Javier Bardem, pensé que si pudiera hacer un 5% de lo que él hacía, sería feliz y al día siguiente empecé a estudiar en su escuela. Es un regalo despertarte cada día y saber dónde enfocar tus energías.

¿Dónde te enfocas?

Como mínimo, en no tener que hacer otra cosa para tener que pagar la luz, ya sea haciendo X-Mens o películas de ensayo. Y como máximo, lo bueno que tiene esta profesión es que no tiene límites, aunque incluya muchos sacrificios.

¿Te confunden con otro famoso por la calle?

A veces me dicen: “¿Tú no eres el de AzulOscuroCasiNegro?”, por Quim Gutiérrez. Y en una época que llevaba perilla me decían que me parecía a Johnny Depp… y me dejé la perilla hasta... [risas]

De no ser actor, ¿qué harías?

Sería músico, toco la batería. Creo que la música tiene algo de placer inmediato.

¿Tienes un grupo?

Antes de irme a Londres empecé algo con mi cuñado que también es músico, pero de momento nada.

¿Qué tipo de música tocas?

Como es una batería electrónica, engancho el iPod y últimamente toco mucho Kings of Leon.

¿También cantas?

Me gusta mucho, pero le tengo mucho respeto porque mi madre y mi hermana son cantantes. Mi hermana tiene ahora un grupo que se llama El mundo de Murphy.

Mostrar comentarios

Códigos Descuento