Anoche, Kathryn Bigelow cosechó unas cuantas alegrías más a cuenta de En tierra hostil, su película bélica que se perfila como favorita en los Oscar. En la entrega de los BAFTA, los premios más importantes del cine británico, la cinta cosechó los galardones de mejor película, mejor guión original, fotografía y montaje.
"Estoy tan emocionada que casi no puedo hablar", declaró Bigelow (en la imagen, junto al actor Clive Owen), que mencionó en su discurso a "todos los hombres y mujeres en los campos de batalla".
El ex marido de la directora, James Cameron, no se fue a casa tan cargado como ella: al revés de lo ocurrido en los Globos de Oro, donde fue la máxima triunfadora, su Avatar obtuvo sólo dos BAFTA, a la mejor fotografía y mejor diseño de producción.
Colin Firth, por Un hombre soltero, y Carey Mulligan (An Education) ganaron los premios al mejor actor principal y la mejor actriz principal, respectivamente. De forma nada sorprendente, los multipremiados Christoph Waltz (Malditos bastardos) y Mo'Nique (Precious) fueron aclamados como mejor actor y actriz de reparto.
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