'El Camino: Una película de Breaking Bad' duraba originalmente tres horas

A los pocos minutos de El Camino: Una película de Breaking Bad el espectador puede confirmar que, por mucho que sea un largometraje, mantiene el espíritu de la serie que le precede. Esto es: que se toma su tiempo. El ritmo del film que Vince Gilligan ha dirigido para Netflix es paciente y meditabundo, y se extiende sin problema hacia las dos horas de duración sin que, absorbidos como estamos, apenas nos demos cuenta.

¿Habría funcionado de durar un poco más? Nunca lo sabremos, pero el caso es que Aaron Paul, durante una entrevista con Collider, ha revelado que originalmente El Camino era aún más larga, ocupando tres horas de metraje. El intérprete de Jesse Pinkman afirma que Gilligan tuvo que recortar un tercio de lo inicialmente rodado para conseguir una duración algo más cinematográfica, pero no da muchos más detalles sobre qué contaban estas escenas eliminadas.

¿Más flashbacks? ¿Jesse topándose con más problemas? ¿Más cameos? El Camino ha acabado siendo un film lo suficientemente compacto como para que no echemos nada de menos, pero a nadie le haría daño que estas escenas fueran reveladas de alguna forma en el futuro. Sólo es una sugerencia, Vince.