'El caballero oscuro: la leyenda renace': ¿De izquierdas, o de derechas?

¿Es la nueva aventura de Batman una arremetida contra el movimiento 'Occupy', o un intento de perjudicar a los Republicanos? La prensa y los actores del filme responden. Por YAGO GARCÍA
'El caballero oscuro: la leyenda renace': ¿De izquierdas, o de derechas?
'El caballero oscuro: la leyenda renace': ¿De izquierdas, o de derechas?
'El caballero oscuro: la leyenda renace': ¿De izquierdas, o de derechas?

Además de por provocar una ola de terror en EE UU, y el resto del mundo, y por amargar el mayor estreno del verano, el tiroteo en Aurora (Denver, Colorado) durante la premiére de El caballero oscuro: la leyenda renace pasará a la historia por otras razones. La principal será el haber paralizado las hostilidades preelectorales entre Barack Obama y su rival del Partido Republicano, Mitt Romney, quienes han emitido sendos comunicados doliéndose por la tragedia. Y otra menos llamativa, pero también importante, es el haber puesto el punto final (o un punto y seguido) a un debate que sostiene la prensa anglosajona desde los primeros pases del filme: ¿es la nueva película de Christopher Nolan un panfleto de extrema derecha, o más bien todo lo contrario?

Que el último filme de la trilogía de Batman se mete en política, y no siempre de forma afortunada, es algo que puede captar cualquier espectador. Nuestras primeras impresiones de la película lo consignaban así, calificando a este mensaje de "confuso" y advirtiendo de que la postura de Nolan, y la de su héroe, "puede ser muy fácilmente tildada de reaccionaria". Lo cierto es que los rumores sobre un posible rodaje del filme en la Wall Street ocupada por manifestantes fueron la primera pista sobre algo que, efectivamente, está ahí. Si El caballero oscuro se metió en aguas pantanosas equiparando el combate entre 'Bats' y el Joker de Heath Ledger con la 'Guerra contra el Terror', [SPOILERS] la toma de Gotham City por parte de Bane (Tom Hardy) y sus secuaces resulta una nada disimulada sublevación de izquierdas, con tribunales populares (y amañados), persecución de los ricos y poderosos y neutralización de las fuerzas del orden. [/SPOILERS] ¿De qué parte se posicionan la película, y el director?

Por una parte, como señala el Hollywood Reporter, uno diría que el cineasta tiene las miras puestas más en la gente corriente (la cual, al fin y al cabo, forma el grueso de su público) que en aquellos con un nivel de vida digno de Bruce Wayne. Durante una fiesta de la alta sociedad, cuyos excesos Nolan subraya con trazos gruesos, la estupenda Catwoman de Anne Hathaway espeta: "Cuando todo esto se acabe, os preguntaréis cómo pudísteis vivir con tanto y dejarnos tan poco al resto". Algo que en una época de recortes, subida de impuestos y rescates bancarios puede tocar la fibra sensible de muchísimos espectadores. Pero el rotativo estadounidense también subraya que la figura de Batman es la de "un dictador benevolente", con el cual sólo podemos simpatizar "porque sabemos, sin dudas, que es el bueno de la historia".

Citando también el interrogatorio a Joker a El caballero oscuro, tan reminiscente de una cierta brutalidad policial, The Hollywood Reporter prefiere jugar a nadar y guardar la ropa. Desde The New York Times, la veterana crítico Manhola Dargis apuesta a la misma carta, afirmando que "Batman oscila entre polos opuestos" y que resulta imposible pedir coherencia a un personaje tan desquiciado. Algo que sus colegas británicos de The Guardian ni se plantean.

El segundo periódico más leído del Reino Unido se pregunta: "¿Quieres a un capitalista enmascarado como superhéroe?". Y, echando sal a la herida, proclama: "Resulta que el hombre corriente necesita a un millonario con mala leche para llevarle por el buen camino, o para apalearle si es necesario". Además, considera que el héroe de Gotham "sólo debe su superioridad moral a haber heredado una fortuna". Aun así, la crítica de Catherine Shoard reconoce a Nolan "la audacia" de obtener un blockbuster presentando una visión "radicalmente conservadora" de la actualidad.

El propio Nolan, como bien sabemos, evita relacionar sus filmes con temas del mundo real, y siempre insiste en que Batman es un personaje de cómic. Pero sus actores sí que han abierto la boca al: hablamos de Gary Oldman y Joseph Gordon-Levitt, quienes respondieron a preguntas sobre el asunto para MTV. "La gente interpretará [la película] como quiera", comentó Oldman, y prosiguió: "Christopher es brillante, pero no tiene una bola de cristal y no pudo predecir todo esto". "La película va a suscitar un montón de conversaciones, y eso está bien, pero que nadie espere que proponga soluciones a la crisis", remachó Gordon-Levitt.

Pero, sin duda, lo que ni Gordon-Levitt ni Oldman podían sospechar era que el locutor de extrema derecha Rush Limbaugh tomase cartas en el asunto... Para proponer la tesis contraria: que El caballero oscuro: la leyenda renace es un panfleto de extrema izquierda concebido para perjudicar a Mitt Romney. ¿Por qué? Pues, según la alambicada lectura de este periodista, porque el político republicano ha tenido problemas legales relacionados con una compañía financiera llamada Bain Capital, en la que desempeñó diversos cargos. Bane, Bain... ¿Lo cogéis? Claro que aquí hablamos del mismo sujeto que acusó a Michael J. Fox de exagerar los síntomas del Parkinson para favorecer la investigación con células madre. Será mejor que sigamos el ejemplo de Morgan Freeman, quien consultado al respecto contestó: "Me pregunto cómo ha podido alguien llegar a una conclusión así".

¿Cuál es la postura política de El caballero oscuro: la leyenda renace? ¿Podemos tomárnosla en serio? Estas preguntas están en el aire, pero las repercusiones del tiroteo de Colorado harán, probablemente, que nunca lleguen a cristalizar en un debate sólido. Recordamos también que, en los cómics, 'Bats' puede estar un poco más a la derecha que Genghis Khan (si lo escribe, por ejemplo, Steve Englehart) o ser un anarquista millonario (en los guiones de, por ejemplo, Grant Morrison). Pese a todo esto, en CINEMANÍA hacemos nuestras las palabras con las que Gary Oldman despide su intervención en MTV: "No está mal que una película palomitera nos lleve a plantearnos estas cosas, ¿verdad?".

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