Disney pasa de la Comic-Con

¿Se avecinan tiempos de cambio para la Comic-Con? Parece claro que sí. La que en su momento se conoció como la gran convención de San Diego dedicada al mundo de los cómics y desde hace unos años fue tomada por las majors de Hollywood como escaparate publicitario prioritario para sus futuros proyectos podría iniciar en 2014 un nuevo viraje temático y empezar a ser acaparada por las productoras de televisión. De hecho, hay estudios de cine que ya ni siquiera van. La semana pasada nos tomábamos la ausencia de Batman v Superman: Dawn of Justice del panel de Warner Bros. y el anuncio de la no comparecencia de Lucasfilm como indicativos de que tal vez se estuvieran preparando apariciones sorpresa, pero es posible que la realidad sea más decepcionante, ahora que otros estudios importantes también han dicho que no tienen intención de viajar hasta San Diego.

En Badass Digest se hacen eco de la ausencia absoluta de Disney, lo que ya reduce toda esperanza de hipotéticas novedades sobre Star Wars: Episodio VII al panel de la serie Star Wars Rebels. También anula la posibilidad de ver nuevos materiales de 6 héroes, la Tomorrowland de Brad Bird y George Clooney o la futura película de Pixar, Inside Out (Divertida-mente). Como señalan en la misma web, está claro que Disney ha considerado que se basta a sí misma para generar interés mediático por sus próximos proyectos y no necesita el escaparate de la Comic-Con para generar ningún ruido. Sin ir más lejos, ya tienen en el D23 su propia Comic-Con exclusiva para sí mismos. ¿Para qué juntarse con todas esas otras productoras deseosas de atención, cuando ellos pueden conseguirla en cantidades industriales cuando quieran?

Sin embargo, un conglomerado tan poderoso y autosuficiente como Disney no es el único en ahorrarse el billete de avión a San Diego, el alquiler del pabellón de la feria o el alojamiento y dietas para sus VIP invitados. La más modesta Lionsgate tampoco acudirá al reclamo de los cerca de 150.000 asistentes que se esperan durante el evento del fin de semana del 24 al 27 de julio. En vez de llevar a Jennifer Lawrence, Josh Hutcherson y compañía de viaje, el estudio de Los juegos del hambre: Sinsajo. Parte 1 probablemente decida estrenar el primer tráiler de la tercera entrega de la misma saga durante las mismas fechas. ¿Alguien duda que conseguirá tanta repercusión como si hubiera sepultado una parte importante del presupuesto promocional en darse un baño de multitudes en la Comic-Con?

Queda por saber cómo afectarán estas ausencias al resto de estudios asistentes. Al haber menos saturación (es un decir), ¿tendrán la oportunidad de que sus productos se promocinen mejor y consigan más atención? ¿O la marcha de grandes reclamos provocará que la Comic-Con empiece a perder la tremenda relevancia de la que viene gozando desde hace unos cuantos años? De que eso último no pase, probablemente las principales encargadas serán las series de televisión.

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