Avalancha de cineastas contra los premios relegados de los Oscar 2019

La decisión de la Academia de Hollywood de entregar durante las pausas para publicidad los premios de algunas categorías de los Oscar 2019 no ha sentado nada bien entre la comunidad cinéfila ni tampoco entre los cineastas. Que se queden fuera de la retransmisión televisiva en directo las categorías de mejor fotografía, mejor montaje, mejor maquillaje y peluquería y mejor corto de ficción se considera un menosprecio intolerable hacia el arte cinematográfico, especialmente en los dos primeros casos: son precisamente los elementos esenciales que definen el cine como un arte con lenguaje propio.

No sorprende que varios directores hayan decidido proclamar su descontento a través de las redes sociales. El mexicano Alfonso Cuarón, cuya Roma es una de las máximas favoritas de esta edición de los Oscar, ha sido uno de los más contundentes; y también uno de los afectados directamente, pues también es candidato al Oscar de mejor dirección de fotografía.

"A lo largo de la historia del cine han existido obras maestras sin sonido, sin color, sin historia, sin actores y sin música. Ni una sola película ha existido sin fotografía ni montaje".

Su compatriota Guillermo del Toro, que el año pasado ganó las estatuillas de mejor dirección y mejor película con La forma del agua, se ha pronunciado en parecidos términos con uno de los tuits más compartidos entre el sector cinéfilo, como por Edgar Wright o James Mangold.

"No me atrevería a sugerir qué categorías deberían eliminarse de la retransmisión de los Oscar, pero fotografía y montaje están en el corazón mismo de nuestro oficio. No son herencia de la tradición teatral o literaria: son el cine en estado puro".

A la directora de fotografía Reed Morano (El cuento de la criada) tampoco le ha gustado nada la decisión y cree que si la Academia necesitaba recortar tiempo podía haber encontrado otros tramos de la ceremonia más prescindibles.

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"Cuando las audiencias son más importantes que aquellos que estás celebrando. ¡Claro que los ingresos son más importantes que el arte (que genera ingresos)! Así que lo más fácil es quedarse callado en vez de defender el arte que tú mismo creas. Un día más en Hollywood, amigos. Definitivamente necesitamos ver interpretaciones infinitamente completas de esas CINCO canciones nominadas. Estoy segura de que con esas CINCO actuaciones en directo podríamos haber guardado un pequeño instante para celebrar LOS DOS PILARES FUNDAMENTALES DE CUALQUIER PELÍCULA".

Rian Johnson (Star Wars: Los últimos Jedi), por su parte, ha compartido el tuit de su director de fotografía habitual, Steve Yedlin.

"Un programa de televisión cuyo único propósito es empaquetar para el consumo del público una celebración del oficio del cine anuncia que la celebración del oficio del cine es demasiado aburrida para el consumo del público".

El histórico William Friekdin (The French Connection, El exorcista) lo tiene claro: los Oscar pierden cualquier relevancia y legitimidad como premios de cine con esta decisión.

"Menudo insulto dar durante las pausas de publicidad el premio a las dos cualidades más esenciales del cine. Es una decisión equivocada que priva a los premios de cualquier relevancia que les quedara. Ya solo son una plataforma para anuncios".

Jason Reitman (Up in the Air, Tully), cuatro veces nominado en el pasado, también ha dedicado un par de tuits al tema.

"El cine es montaje. Decidme que no es cierto, Oscars".

"Para todos aquellos jóvenes que puedan estar viendo los Oscar y sueñen con convertirse algún día en montadores, directores de fotografía o maquilladores, espero que disfrutéis de los números musicales".

Hasta la actriz Riley Keough (Lo que esconde Silver Lake) se encuentra indignada por la decisión de la Academia.

"Encuentro esto muy difícil de digerir".

Otro actor que ha hecho patente su descontento ha sido Russell Crowe.

"¿La Academia está suprimiendo mejor fotografía, montaje y maquillaje de la retransmisión televisiva? Es una decisión tan fundamentalmente estúpida que ni siquiera me voy a molestar en criticarla de forma ingeniosa. Es demasiado estúpida para decir nada".