Acusan a 'Érase una vez en Hollywood' de maltrato animal

Tras lidiar con los familiares de los personas reales que aparecen en su película, Quentin Tarantino ahora ha de hacer frente a las quejas de PETA.

Era obvio que la idea de Quentin Tarantino de ambientar Érase una vez en Hollywood en 1969, y centrar la trama en torno a los asesinatos de la familia Manson, no iba a estar exenta de polémica. Y en efecto en los últimos meses el director ha sido criticado por varios familiares de las personas reales implicadas, pero la última controversia les ha pillado a todos de sorpresa, cuando PETA (la organización estadounidense de Personas por el Trato Ético de los Animales) ha acusado a Tarantino de maltrato animal.

En Érase una vez en Hollywood hay un papel de cierta importancia para Sayuri, una pit bull terrier que en el film interpreta a Brandy, la mascota del especialista Cliff Booth (Brad Pitt). Su aparición en el film fue muy celebrada en el Festival de Cannes, donde ganó el Palme Dog Award concedido a animales que acaban marcando la película donde aparecen (otros perros premiados en el pasado han sido Uggie de The Artist o Dug de Up, aunque este fuera animado). No obstante, dicho simpático logro se ha visto ensombrecido por un reciente comunicado de PETA.

Según recoge IndieWire, el departamento de investigación de la crueldad de este organismo investigó el origen de Sayuri, y descubrió que Tarantino había obtenido a los animales que la interpretaron de un criadero. A raíz de las duras condiciones que atraviesan los perros en este tipo de sitios, y reparando sobre todo en la delicada situación que atraviesan los pit bulls en EE.UU., PETA ha aseverado que al director "debería darle vergüenza".

"Los pit bulls son los animales más maltratados y abandonados del mundo de los perros, y Quentin Tarantino no ha hecho sino empeorar la situación, consiguiendo los perros de un famoso criadero para Érase una vez en Hollywood", decía el comunicado. "Los pit bulls suelen ser encadenados, enjaulados, descuidados, golpeados e incluso quemados hasta la muerte. Y al igual que los perros de esta película, sus orejas son mutiladas a menudo para dar una imagen de dureza".

"Los retratos irresponsables como este son parte de la razón por la que los pit bulls desbordan los refugios de nuestro país. Mientras la comunidad humanitaria hace todo lo posible para hacer estos animales (principalmente, intentando cerrar estos criaderos), Tarantino ha dado un paso atrás", concluía. Érase una vez en Hollywood se acaba de estrenar en EE.UU. con gran éxito de público y consiguiendo haber ido atajando las críticas hasta ahora, pero de momento el director no ha querido pronunciarse sobre estas acusaciones.

En España, el film se estrena el próximo 15 de agosto.

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