Intervius

UNA DE LAS COSAS MÁS DURAS que hay en la vida es hacer entrevistas. Cualquiera puede cruzar el canal de La Mancha a nado, arrastrar un camión con los dientes o comerse 50 huevos duros en una hora, pero yo he visto a muchos actores jóvenes desmayarse después de una buena batería de preguntas. Sin ir más lejos, una vez le tuve que hacer el boca a boca a Eloy Azorín. Le acababan de preguntar sobre qué valoraba en un guión. Por eso hoy, desde mi atalaya, voy a dar unos consejos para que cualquier actor novel, incluso si es bueno, pueda enfrentarse a una interviu o a varias.

Lo primero que hay que hacer es no ponerse nervioso ante el entrevistador, es probable que no sepa quién eres y que esté ahí porque se lo han dicho y punto. Los periodistas por lo general son gente que bebe a escondidas y trasnocha en piano-bares, o sea que presión, ninguna.

Después es muy importante tener las respuestas preparadas de antemano, no hay que preocuparse por decir siempre lo mismo, incluso eso es bueno, da la impresión de que tienes una fuerte voluntad y mucho mundo interior. ¿No sabéis de que os hablo? Atended:

-¿Un libro? El principito.

-¿La presión de la fama? Presión es no poder pagar la hipoteca.

-¿Alguien a quien admiras? A la gente que salva vidas, los bomberos y los médicos. Ellos sí deberían firmar autógrafos.

-¿Un defecto? Ser muy perfeccionista (otra opción mas excéntrica: ¿Sólo uno?).

-¿Qué te hace disfrutar? Las cosas pequeñas de la vida.

-¿Qué valoras en otra persona? La sinceridad.

Por último, no hay que olvidar reírse mucho, para que el entrevistador pueda poner entre paréntesis: “Contesta entre risas”. Da la sensación de que te lo has pasado muy bien y oculta tu

intención de marcharte a casa cuanto antes.