Blancanieves y la leyenda del cazador

Segunda película en lo que va de año sobre Blancanieves –¿soy el único que disfrutó con Mirror, mirror, la chaladura bollywoodesca de Tarsem Singh?–, pero que nadie se llame a engaño y vea una repentina fiebre por el clásico popular: en Blancanieves y la leyenda del cazador la referencia al cuento es más un franquiciado a lo Battleship que una relectura. Están los elementos básicos con los que nos durmieron nuestros padres (madrastra, enanos, espejito mágico… ¡hasta la manzana tiene su cameo!), pero el juego es que sean cualquier cosa menos lo que esperas que sean. Un paso más allá del que dio Tim Burton en su Alicia en el País de las Maravillas –se notaba que al padre de Bitelchús ese cuento le importaba algo–, en Blancanieves… la amiga de los enanitos es más una Juana de Arco con armadura y poderes fertilizantes-sanadores que una damisela en apuros. No necesita que ningún príncipe la despierte y su belleza es más un arma de convicción masiva que un atributo. Vamos, que a esta Blancanieves no la reconoce ni la madrastra que la parió.

Con préstamos que van desde la trilogía de El señor de los anillos a Robin Hood, pasando por una discutible invocación a Legend o El laberinto del fauno, la película va picoteando allá donde la dejan para aparentar ser más original de lo que en realidad resulta. Curiosamente, su manera de presentar a los enanos –aquí un reparto de lujo hobbitizado, con Ian MacShanee, Toby Jones, Eddie Marsan, Bob Hoskins o Nick Frost– resulta más parecida a la de Mirror, mirror de lo que podían sospechar sus responsables.

Pero entre tanto discurso sobre la libertad de un pueblo para levantarse contra el tirano opresor (y abrazar una monarquía autoritaria, ahí dejo eso), tanta batalla campal y asalto al castillo Exin, romance ligero y grandes poderes que conllevan grandes responsabilidades, emerge Charlize Theron. Radiante, siniestra y, sorpresa, vulnerable, su madrastra es una reinvención en toda regla, una criatura atormentada a cuya maldad sin límites por fin encontramos explicación. La actriz da una profundidad a su personaje que hace que cada minuto con ella en pantalla la historia atrape, dejando atrás la sensación de que este episodio de Dragones y mazmorras ya lo hemos visto. El espejito mágico puede decir lo que quiera, pero la más bella esta vez es la mala.

MANUEL PIÑÓN

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FICHA TÉCNICA

Blancanieves y la leyenda del cazador

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  La reina está decidida a destruir a toda costa a una joven que la supera en belleza. Sin embargo, el cazador a quien encomienda la misión de matarla, en realidad le enseña a defenderse.

• RESUMEN: Diga lo que diga el espejito mágico, la más bella de esta película es Charlize Theron.

• ESTRENO: 01/06/2012

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  [Snow White and the Huntsman] Aventuras / EE UU / 2012 / Dir: Rupert Sanders / Reparto: Kristen Stewart, Chris Hemsworth, Charlize Theron, Ian McShane, Bob Hoskins, Toby Jones, Ray Winstone / Guión: Hossein Amini, Evan Daugherty, Evan Spiliotopoulos