¿Qué le quedaba por hacer a Bill Murray? ¿De qué forma podía aún dejarnos con la boca abierta? Si te descuidas se come tus patatas fritas, sales por la noche y te lo puedes encontrar sirviendo copas en un bar, ... Sabíamos que canta y baila, por supuesto, además de actuar, pero aún le quedaba un as en la manga llena de talentos.
Según desvelaba el New York Times, Bill Murray se lanza a conquistar la industria musical y, es más, se ha propuesto hacerlo seriamente. O eso parece. Este verano sacará al mercado un disco de música de cámara dirigido por el violonchelista Jan Vogler.
Titulado New Worlds, el proyecto nació en 2013 cuando Murray y Vogler se conocieron en un vuelo entre Berlín y Nueva York. Más tarde, Murray invitó al músico al paseo de poesía anual atravesando el Brooklyn Bridge y fue entonces cuando empezaron a hablar de un disco juntos.
El disco incluirá canciones y extractos literarios que "exploran temas de la identidad y la historia americanas", como números de West Side Story, y autores como Walt Whitman o Ernest Hemingway, todos entonados por Murray. Pero también será "una colisión entre América y Europa", por la variedad de nacionalidades del grupo y sus intereses.
En una de las piezas desvelada el actor leerá un pasaje de Huckleberry Finn, de Mark Twain, mientras los músicos tocan Moon River.
La última salida del actor ha pillado por sorpresa hasta a sus amigos íntimos. Sofia Coppola, por ejemplo, con quien trabajó en Lost in Translation y en A Very Murray Christmas por última vez, fue la primera sorprendida... aunque tampoco se sorprendió.
"Esto es muy inesperado", le contó al New York Times mientras grababa con su móvil a su amigo. "Pero como es Bill no me sorprende. Él siempre sorprende. Es lo que le hace divertido".
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