OPINIÓN

The Division

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Nos ponemos el cono de papel albal en la cabeza y nos dejamos llevar por la conspiranoia hasta un futuro no muy lejano en el que un bio-atentado terrorista a una escala sin precedentes ha conseguido dar al traste con nuestra acomodaticia sociedad de consumo. En un periodo de extrema crisis social y económica, The Division, una fuerza paramilitar, es la única fuerza que separa lo que queda de civilización del regreso a la barbarie más medieval. Si no fuera porque se trata de un escenario hipotético abanderado por Tom Clancy, a uno le entra algo de miedo en el cuerpo cuando fríamente piensa lo factible que un escenario así resulta en realidad.

Dramatismos a parte, The Division es el juego de moda. Con unos gráficos impresionantes, una estupenda mezcla de RPG y acción en tercera persona y el multijugador de mayor éxito reciente, el nuevo título de Ubisoft cumple las promesas hechas por la desarrolladora y colma las expectativas de los jugadores.

The Division ha sido, desde su primer anuncio hace tres años en el E3, la gran promesa de Ubisoft para las consolas de nueva generación. Tras los problemas de desarrollo y la tibia recepción de Watch Dogs, y con las nuevas consolas ya a pleno rendimiento, este nuevo título cobraba una gran importancia para Ubi. Con algunas de sus franquicias más importante de capa caída, la empresa gala está demostrando en los últimos meses un intenso afán por recuperar el cariño perdido de los jugadores. Las recientes lanzamientos de Rain Bow Siege y, sobre todo, el fantástico Far Cry Primal son títulos que se posicionan entre los más importantes del año, y a ellos se une The Division.

Las primeras sensaciones con The Division son abrumadoras. El escenario resulta tan grande, tan detallado, y desde el principio se plantean tantas cosas para hacer, entre la trama principal y las misiones secundarias, que a uno le cuesta decidir hacia dónde encaminarse. Mi recomendación es que trates de mejorar tu equipo lo antes posible porque el juego resulta, incluso en las primeras misiones, bastante difícil. Esto es porque la mayoría de las misiones importantes no están pensadas para enfrentarlas en solitario, si no haciendo equipo con otros jugadores. En The Division compartes escenario y objetivos con la amplia comunidad de jugadores con los que tendrás que cerrar filas si quieres sobrevivir en esta peligrosa visión de la ciudad de Nueva York. Te aviso que no todos los jugadores serán amables y colaboradores contigo, y que más de uno tratará de acabar contigo tras robarte tu equipo y tu fé en la raza humana. Como la vida misma. Así que atento con quién formas sociedad y vigila tu espalda…

Este tipo de juego cooperativo se encuentra tan estupendamente bien integrado en The Division que, salvo algún que otro fallo puntual de los servidores, sólo notarás la presencia del resto la comunidad en los lugares de encuentro con una vez que formas parte de algún equipo o te unes a determinadas misiones. Durante el resto del juego, si quieres, podrás explorar este peligroso escenario urbano, sin duda, uno de lo más detallados y preciosistas que hemos jugado en los últimos meses.

El nivel técnico es tan apabullante que tal vez haga que la gran calidad de la jugabilidad pase desapercibida. Pero a estas alturas ya sabemos que un buen nivel técnico no es determinante a la hora de engancharse a uno a un título, pero una buena jugabilidad es imprescindible. Y The division tiene de sobra. Tu personaje se adaptará perfectamente al entorno y responderá magníficamente a los controles, algo muy importante cuando el peligro acecha casi en cada esquina. No debes confiarte nunca, ya que incluso el matón más tirado con el que te puedas tropezar puede hacer que muerdas el polvo si te pilla al descubierto o con poca munición.

Debes afrontar The Division con un alto grado de pensamiento estratégico, por algo lleva el sello de Tom Clancy. Sobrevivir a alguna que otra escaramuza es divertido, haciendo saltar los cristales de los escaparates y lanzando una granada tras otra. Pero sobrevivir y llegar al final del juego supone tener la cabeza bien fría, elegir bien las batallas que quieres luchar, y tu equipo. Casi siempre será preferible esperar unos segundos para estudiar el terrenos y decidir el mejor curso de acción que lanzarse a lo loco a repartir (y recibir) plomo. Pero por otra parte… ¡Qué divertido resulta lanzarse a lo loco a repartir (y recibir) plomo!

The Division es a día de hoy un título imprescindible para los amantes de los juegos de acción en 3D, los sandbox y las campañas multijugador. Un título que ofrece tantas horas de diversión como horas quieras dedicarle.

Esto es Bazinga!, donde hemos la división está entre disfurtar solo o cargar con un puñado de compañeros.

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