OPINIÓN

Nobody expects the Dragon Age Inquisition!

Nobody expects the Dragon Age Inquisition!
Nobody expects the Dragon Age Inquisition!
Nobody expects the Dragon Age Inquisition!

No esperaba nada de este Dragon Age Inquisition, lo confieso. EA y Bioware tenían una misión, no una side quest de esas de llevar una carta a no se quién el Villatripas de Arriba. No, una misión de esas que que vienen con cinemática: Tras asentar la franquicia Dragon Age necesitaban recuperar el terreno perdido con las últimas entregas y presentar un juego de éxito para la nueva generación de consolas. Y oigan, lo han conseguido.

¿Es el mejor RPG de acción jamás hecho para una consola? Pues no, pero sin entrar en discusiones y preferencias, sin duda es el mejor juego de rol y acción para consolas desde que Bethesda sacó en 2011 aquel del tipo que perseguía a los dragones dando gritos.

Dragon Age nos devuelve al universo de fantasía creado por Bioware y en esta ocasión nos presenta el mayor mapa y la mayor amenaza desde el estreno de la serie. Ya desde el editor de personajes veremos que las posibilidades son muchas y que Dragon Age Inquisition apuesta por las decisiones del jugador.Tras una presentación de la trama y un breve tutorial, nos dejarán sueltos por el campo para que cada cual se cree su propia historia.

El gran reto que uno enfrenta ante Dragon Age Inquisition es ceñirse al modo historia. Las misiones e historias secundarias son tantas, tantísimas, y algunas tan largas y complicadas, que la vida de este juego se presupone muy, muy larga. A pesar de que el jugador no se moverá por un mundo abierto, sí que saltará a su elección, de un escenario a otro de un extenso mapa y podrá moverse libremente por cada una de estas extensas zonas. Explorar, mantener grandes combates, sumplir misiones secundarias o ceñirse a los requerimientos de la trama principal, cada zona es un pequeño mundo. Hay tanto por hacer en cada una de estas zonas que es muy posible que el jugador llegue a agobiarse.

Sin duda la cantidad de cosas que se pueden hacer en este juego es un síntoma del gran esfuerzo que han hecho los desarrolladores por dotar a Dragon Age Inquisition de una historia de fondo rica y detallada que ya quisieran para ellas muchas sagas literarias de fantasía épica. Siglos de historias, toneladas de nombres y de fechas, forman un red de seguridad sobre la que se construye la historia principal del juego. Ésta tomará prestado y evolucionará algunas ideas e historias que ya estaba en anteriores entregas de Dragon Age. Reaparecerán personajes y se cerrarán tramas. No es imprescindible haber jugado a los títulos anteriores, pero aquellos que sean fans de la saga vivirán momentos especialmente emocionantes.

Ya seas un mago, un pícaro, un guerrero, elfo, enano, humano, elijas el camino que elijas, Dragon Age Inquisition te asegura horas, días, semanas y meses de juego. ¿Cuántos títulos pueden decir eso en estos días? El tamaño y la diversidad del juego ha supuesto un pequeño sacrificio respecto a potencia técnica. Los gráficos no son los mejores que hemos visto en estas nuevas consolas, claro que no, aunque sí que hay una gran mejoría respecto al anterior juego. La calidad de las texturas o la iluminación de los escenarios es digna de mención, si bien no estamos hablando de Battlefield. El apartado sonoro es impresionante, la calidad de la atmósfera, diferente en cada zona del juego, el trabajo de los actores y la potentísima banda sonora destacan en un apartado que suele pasar desapercibido. Dicho esto diré que en este juego encontraremos, no algunos, si no muchos de los mejores y más bonitos escenarios creados para un videojuegos en muchos años. El trabajo de producción y diseño de zonas, personajes, armas y armaduras está a años luz de lo que podemos ver en otros juegos. Eso a pesar de la “firma” de Bioware en sus productos que hacen que casi todas las superficies metalizadas de sus objetos reflejen la luz hasta deslumbrar….

Y sí, tiene sus bugs, claro que sí, pero la mayoría resultan realmente simpáticos e incluso divertidos. Algunos un poco molestos, pero no son demasiados y siempre podemos confiar en la llegada de algún parche que lo solucione.  En cualquier caso, difícilmente superable.

La mecánica del juego es similar a la de otros RPG de acción: avanzar por distintas localizaciones, manteniendo combates aleatorios y resolviendo diferentes misiones hasta que podamos avanzar en nuestra trama y mejorar a nuestro personaje, para que sea lo suficientemente poderosos como para vencer al gran mal de turno que amenaza la existencia de la realidad. Dragon Age no innova ni en el género ni respecto a entregas anteriores. Incluso el sistema de conversaciones y relaciones entre personajes es similar al que comparte con su hermano Mass Effect. En este sentido todo sigue igual, lo cual me parece estupendo porque era uno de los puntos fuertes de la saga. Lo que sí que me ha sorprendido es un nuevo y pequeño elemento de estrategia que nos permite gestionar los recursos de la inquisición, nuestro ejército personal de héroes, para obtener ventajas políticas y económicas, y desbloquear zonas y posibilidades de juego. No es nada del otro mundo, pero es algo más que podemos hacer en el juego, que va desde buscar ganado perdido, a reclutar nuevos héroes a elegir las cortinas de nuestra base de operaciones (y eso es en serio).

Ya os podéis hacer una idea de que el juego me ha encantado, pero hoy voy a dar la razón fundamental por la que Dragon Age Inquisition me tiene en el bolsillo: es un juego para épocas de crisis. Actualmente hay juegos que salen al mercado, a un precio 70€, y que te duran menos de 10 horas de juego y para usar su multijugador tienes que pagar. Dragon Age Inquisition es un juego que se amortiza: en mis primera 20 horas de juego apenas había llegado a la mitad de la historia principal y realizado una quinta parte de las misiones secundarios. ¡No había ni visitado una tercera parte de las localizaciones del juego!. Sí, para el multijugador hay que pagar PS Plus o Live, pero importa poco si el juego en sí te va a durar meses y vas a poder rejugarlo con distintos personajes, tomando distintas decisiones durante tus partidas. Así a uno le duele mucho menos pagar el precio de estos juegos.

Dragon Age Inquisition es uno de mis juegos preferidos del año, ¿quieres más motivos?, juégalo, porque te convencerá.

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