OPINIÓN

Gears of War Ultimate Edition

Gears of War Ultimate Edition
Gears of War Ultimate Edition
Gears of War Ultimate Edition

No es un remake, es un juego nuevo

Uno de los juegos más emblemáticos de la consola de Microsoft, y primer capítulo de una saga que ha marcado a una generación reciente de jugadores, recibe un un lavado de cara para su adaptación a la nueva generación de consolas. Pero más que una puesta a punto diré que parece haberse sometido a uno de esos intensos entrenamientos de las películas, en plan Rocky, Karate-Kid o Contacto Sangriento 2. Y es que este Gears of War Ultimate Edition, cuya versión original se publicó en 2006, regresa como título propio de Xbox One, con toda la potencia de la nueva consola de Microsoft. Se trata del mismo juego, pero no lo parece. El acabado técnico es completamente diferente, mejorado para explotar el rendimiento de Xbox One. El resultado es un juego nuevo, tal cual, de la más reciente hornada, y no una de esas adaptaciones “remastered” que nos han llegado en los últimos meses, que simplemente se trata del mismo juego con texturas en alta resolución. Este Gears of War Ultimate Edition y su versión original comparten la trama, pero parecen dos juegos distintos.

La historia de Gears of War Ultimate Edition nos devuelve a un planeta Sera asolado tras la guerra contra los Locust, y de nuevo, con Marcus Fénix como protagonista, que deberá liderar un pelotón de aguerridos combatientes. El avance de este equipo será un tortuoso viaje por diferentes escenarios salpicados de situaciones llenas de acción e impresionantes momentos de pura emoción cinematográfica. Todo lo que hizo del Gears of War un título clásico, está de nuevo aquí. Pero las mejoras de las que hablaba anteriormente no se quedan sólo en el bonito aspectos visual (y sonoro) que embellece esta versión Ultimate Edition. También la jugabilidad ha sufrido mejoras puntuales. Eso no quiere decir que nuestro personaje sea más ágil de lo que era hace 9 años, o que cuando está en carrera sea más manejable que una locomotora sin frenos. Pero sí que hay pequeñas mejoras que los jugadores veteranos encontrarán y valorarán muy positivamente.

Tal vez el mayor punto negativo que podemos achacar a esta nueva versión es la IA de los Personajes No Jugadores. Tanto en nuestro equipo, con algún personaje decidiendo que es un momento estupendo para convertirse en carne de cañón en medio de un intenso tiroteo o su afición aleatoria de correr contra los muros, como con los enemigos, algunos aquejados de una ceguera preocupante, o tal vez de un pacifismo radical, ya que a no dispararán contra nosotros ni aunque bailemos la Macarena a un metro de ellos.

Lo que le faltaba a la magistral campaña del juego original de 360 viene con algo más de una hora de juego extra que sí pudieron disfrutar los usuarios de PC. Y los añadidos no se quedan ahí, ya que las campañas multijugador también reciben todos los extras y DLCs que se crearon para el juego, una de las grandes bazas del título, también potenciada técnicamente para esta nueva versión.

Gears of War Ultimate Edition es un juego indispensable para todos los jugadores que posean una Xbox One. Si ya eres un fan de la saga, esta edición supone reencontrarte con el título que lo comenzó todo de una manera que te hará creer que estás ante un juego completamente nuevo. Si no eres un enamorado de la franquicia, este es el momento para despertar el romace, porque podrás disfrutar de todo aquello que hizo de este título un abanderado de la pasada generación de consolas, con la potencia y espectacularidad de la nueva. Una edición que no puede faltar en tu ludoteca, porque cuando lo genial se vuelve todavía mejor, es un crimen de guerra perdérselo.

Esto es Bazinga!, donde los engranajes de la guerra no se paran ni un instante.

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